El 20 de abril de 2025, un acto de valentía en Playa Chac Mool, Cancún, se convirtió en tragedia. Alejandro Cortez González, un turista estadounidense de 20 años, vio a su amiga luchar contra las olas. Sin dudarlo, se lanzó al mar y salvó a su amiga. Pero el océano, embravecido bajo una bandera roja, no lo dejó regresar. Setenta horas después, el mar devolvió restos humanos que podrían ser suyos, dejando a su familia y a miles de desconocidos con el corazón roto.

Alejandro murió como un héroe: salvó a su amiga
Alejandro, originario de Saginaw, Michigan, estaba de vacaciones en Cancún. Esa tarde, el oleaje en Playa Chac Mool era traicionero. Las banderas rojas advertían peligro, pero la juventud y la lealtad pesaron más. Cuando su amiga gritó por ayuda, Alejandro actuó. Nadó hasta ella, la llevó a la orilla y salvó a su amiga. Sin embargo, las corrientes lo arrastraron. Los rescatistas no lo encontraron. Su desaparición movilizó redes sociales, donde su foto y súplicas de su familia se compartieron miles de veces.
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El 23 de abril, a las 5:00 p.m., turistas frente al Condominio Portofino, en el kilómetro 9.5 del Bulevar Kukulcán, hallaron restos humanos en la playa. Primero, un cuerpo mutilado. Luego, guardavidas confirmaron lo peor: huesos y una cabeza intacta. Las autoridades sospechan que tiburones atacaron el cadáver. La Policía Turística y la Guardia Nacional acordonaron la zona. Peritos de la Fiscalía General del Estado (FGE) trasladaron los restos al Servicio Médico Forense (Semefo) para pruebas de ADN.

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Tragedia tiene en shock a Quintana Roo y al mundo
Extraoficialmente, los restos serían de Alejandro. Su madre, Renee González, compartió su dolor en Facebook:
“Oramos por un milagro, pero Dios respondió de otra forma. Encontraron a Alejandro. Lo llevaremos a casa”
La familia, sin pasaportes, no ha viajado a México. Renee pidió donaciones para cubrir los gastos de repatriación. La noticia cruzó fronteras, conmocionando a México y Estados Unidos. En X, usuarios lamentan la pérdida y critican la falta de vigilancia en playas concurridas.
Cancún, con 12 millones de turistas en 2024 según la Secretaría de Turismo, no es ajeno a incidentes. En 2023, un turista murió ahogado en Playa Delfines. Protección Civil reiteró la importancia de respetar las banderas rojas, que indican corrientes peligrosas. Entre 2020 y 2024, Quintana Roo reportó 15 muertes por ahogamiento en playas, según datos oficiales. Alejandro salvó a su amiga, pero su sacrificio destapa la necesidad de más prevención en destinos turísticos.
La FGE espera resultados de ADN para confirmar la identidad. Mientras, la historia de Alejandro, quien salvó a su amiga a costa de su vida, resuena como un recordatorio: el mar no perdona. Su valentía inspira, pero su pérdida duele. Cancún llora a un héroe que no debió partir.
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