En una reciente presentación en el show de Franco Escamilla “Desde el cerro de la silla”, la encantadora Kimberly compartió una historia de su infancia que revela su humildad y su habilidad para divertirse con lo que tenía a su alcance.
Durante su participación en el programa, Kimberly relató su experiencia como parte de una pandilla conocida como “los sin cerebros”. Enérgica y llena de entusiasmo, la joven describió cómo solían organizar peleas entre pandillas, pero a su vez, mostró su ingenio al hablar de las travesuras que disfrutaban.
“Yo me juntaba mucho con los muchachos, una pandilla que se llamaba los sin cerebros, y hacíamos pandillas unos contra otros”, explicó Kimberly.
“A mí me encantaba aventar bombitas de vidrio con gasolina. Tomábamos una botella de cerveza, le poníamos un trapito en la boca y las prendíamos para luego lanzarlas. Lo bueno es que nunca me pasó nada”.
Kimberly continuó revelando sus divertidas travesuras, mencionando que disfrutaba de correr con cajas de mandado que llevaban piedras, machetes y otras cosas.
Además, compartió un detalle interesante sobre el lugar donde almacenaban todo su arsenal.
“Teníamos todo eso listo en la casa de mi tía Tanis. Prestaba su casa porque todos mis primos eran parte de la pandilla de los sin cerebros”, agregó Kimberly.
A través de esta historia, Kimberly demostró su humildad al recordar con nostalgia las travesuras de su infancia. A pesar de contar con recursos limitados, la joven y su pandilla encontraron formas ingeniosas de divertirse y crear memorias duraderas.
La participación de Kimberly en el show de Franco Escamilla fue recibida con risas y aplausos del público, que apreció su genuinidad y su capacidad para encontrar alegría en las pequeñas cosas de la vida.
Su historia sirve como un recordatorio de que la diversión y la felicidad pueden encontrarse en los momentos más simples y en la compañía de seres queridos.
Kimberly, con su relato lleno de humildad y espontaneidad, se ha ganado el corazón de la audiencia y ha dejado una huella indeleble en el escenario del programa “Desde el cerro de la silla”
