Jorge Ibargüengoitia, el prolífico escritor guanajuatense que dejó un impacto indeleble en la literatura y el periodismo mexicano del siglo XX.
Con una destacada carrera como dramaturgo, narrador, cronista y periodista, Ibargüengoitia se ganó la distinción de ser uno de los autores más agudos e irónicos de la literatura hispanoamericana.
Su obra, marcada por una dosis única de libertad creativa, se convirtió en un testimonio crítico de la realidad social y política de México.
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El 27 de noviembre de 1983, Ibargüengoitia perdió la vida en un trágico accidente de aviación en el aeropuerto de Madrid, España.
Este fatídico suceso truncó la trayectoria de un escritor que vivió la mayor parte de su vida desafiando convenciones y desentrañando la complejidad de la sociedad mexicana.
Nacido el 22 de enero de 1928 en Guanajuato, Ibargüengoitia estudió Arte Dramático y Letras en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y Teatro en Nueva York.
Su influencia se extendió más allá de la escritura, participando como promotor cultural y docente en diversas instituciones.
A lo largo de su carrera, Ibargüengoitia recibió prestigiosos galardones, incluyendo el Premio Ciudad de México en 1960 por “La conspiración vendida”, el Premio Casa de las Américas en 1963 y 1964 por “El atentado” y “Los relámpagos de agosto” respectivamente, y el Premio de Novela México en 1975 por “Estas ruinas que ves”.
Su legado literario incluye novelas como “Dos crímenes” (1974), “Las muertas” (1977) y “Los pasos de López” (1982), así como piezas teatrales como “Susana y los jóvenes” (1954) y “El atentado” (1963).
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Con su perspectiva única, Ibargüengoitia transformó la cotidianidad y la vida sociopolítica mexicana en una crítica humorística, con numerosas adaptaciones cinematográficas exitosas.
Para Alicia García Bergua, crítica literaria, Ibargüengoitia es “sinónimo de libertad”, encapsulando en su obra diversas formas de libertad, desde la crítica hasta lo humorístico.
Su mirada única sobre la realidad mexicana, a veces trágica, a veces cómica, sigue siendo relevante y trascendental.
En el aniversario de su fallecimiento, la crítica literaria del país destaca la vigencia y trascendencia de la obra de Jorge Ibargüengoitia, quien, según Juan Villoro, fue “políticamente incorrecto” y nos brindó una perspectiva única que sigue resonando en la actualidad, revelando la vida secreta del país de manera inigualable.