La norteamericana de ascendencia puertorriqueña sorprendió al mundo al revelar en su película musical This Is Me… Now: A Love Story, estrenada el 16 de febrero de 2024: ¡Jennifer López confesó que es adicta al sexo!
En este proyecto, acompañado de un álbum homónimo, marca su regreso a la música tras dos décadas y expone un lado íntimo de la cantante puertorriqueña. En una entrevista con la emisora australiana Carrie and Tommy, López admitió que durante años ocultó aspectos de su vida personal, pero ahora abraza la vulnerabilidad para narrar su evolución emocional, incluyendo su lucha con la adicción al sexo.
This Is Me… Now: el proyecto en el que Jennifer López confesó que es adicta al sexo
El proyecto, que López financió de manera independiente tras el rechazo de varias productoras, combina música y narrativa visual para explorar sus relaciones pasadas, como las que mantuvo con Marc Anthony y Ben Affleck, con quien se reconcilió y casó en 2022. A diferencia de su álbum de 2002, This Is Me… Then, inspirado en su primer romance con Affleck, This Is Me… Now profundiza en los últimos 20 años de su vida, abordando fracasos amorosos y su compulsión sexual.
López aclaró que su adicción se inclina más hacia la búsqueda obsesiva de amor que al sexo en sí, diferenciándola de la ninfomanía, descrita por la Real Academia Española como un deseo sexual insaciable en mujeres, caracterizado por comportamientos compulsivos que generan insatisfacción y vergüenza.
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¿Qué es la ninfonía?
La adicción al sexo, aunque no reconocida universalmente como trastorno por algunos expertos, afecta la vida personal y profesional de quienes la padecen. Según la Clínica Mayo, los síntomas incluyen relaciones sexuales excesivas o consumo constante de pornografía en momentos inapropiados, lo que interfiere con responsabilidades diarias. Tratamientos, como los ofrecidos en clínicas especializadas, incluyen terapia, meditación y contratos de celibato de al menos ocho semanas. Celebridades como James Franco y Justin Bieber también han hablado públicamente sobre sus experiencias con este problema, destacando su impacto en la salud mental.
López no solo expone su verdad, sino que desafía los estigmas sociales sobre la sexualidad femenina. Al declarar que Jennifer López es adicta al sexo, enfrenta críticas que no suelen dirigirse a hombres en situaciones similares, como Ed Sheeran o Bruno Mars, quienes reciben elogios por expresar emociones románticas.
Este doble estándar, también experimentado por Taylor Swift en 2016, subraya la relevancia del mensaje de López. Según un estudio de la Universidad de California (2020), las mujeres que hablan abiertamente sobre su sexualidad enfrentan un 30% más de críticas públicas que los hombres, lo que resalta el valor de su valentía.
Con este proyecto, López fomenta el empoderamiento femenino, animando a las mujeres a discutir su sexualidad sin temor al juicio. Subraya la importancia de distinguir entre una vida sexual saludable y comportamientos patológicos que requieran intervención profesional.
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