La Sala VIP destinada a consejeros del INE durante el reciente debate presidencial ha sido objeto de críticas y reclamos por parte de representantes de las coaliciones y candidatos.
La ubicación preferencial de los asientos para la presidenta del INE, Guadalupe Taddei, y tres consejeros más, quienes tuvieron vista directa al escenario, ha generado distracciones y malestar entre los presentes.
Sala VIP genera controversia
La presidenta de la Comisión de Debates, Carla Humphrey, ha aclarado que la decisión de ubicarse en la Sala VIP fue personal y no institucional.
Además, que no estuvieron involucrados en la determinación de la disposición de los asientos.
Humphrey explicó que inicialmente se había acordado que los asientos estarían orientados lateralmente al escenario para evitar el contacto visual, pero de último momento se modificó la disposición, colocándolos frente al foro.
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Esta modificación tomó por sorpresa a los miembros de la Comisión, generando desconcierto y molestia entre las representaciones de las candidaturas.
Incluso, una candidata expresó su inconformidad, señalando que la disposición de los asientos frente al escenario le resultó distractora al ver las reacciones de los consejeros.
La consejera Humphrey también destacó la preocupación por la presencia de invitados en el foro durante el debate, advirtiendo posibles riesgos relacionados con la producción y el desarrollo del evento.
Estas controversias han puesto en tela de juicio el manejo y la organización de los debates presidenciales, resaltando la importancia de garantizar condiciones equitativas y transparentes para todos los participantes.