Ismael “El Mayo” Zambada García, uno de los líderes más notorios del Cártel de Sinaloa, se declaró no culpable de los 17 cargos que enfrenta en la Corte Federal del distrito Este en Brooklyn, Nueva York.
Los cargos incluyen narcotráfico, lavado de dinero y portación de armas. La declaración se realizó en una audiencia formal de procedimiento ante el juez James Cho.
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Zambada García, quien fue visto en la corte vestido con un uniforme de reo color gris y de manga corta, se presentó con una actitud reservada y respondió con monosílabos durante las preguntas del juez.
A pesar de las acusaciones graves que enfrenta, el acusado optó por no aceptar un juicio expedito.
Este juicio se llevaría a cabo a no más de 70 días de la audiencia formal, programada para el 31 de octubre a las 12 del mediodía ante el juez Bryan Cogan.
El fiscal federal Francisco Navarro explicó al juez Cho que la solicitud de excluir el juicio rápido se basa en la abundante evidencia que el Departamento de Justicia posee contra Zambada García.
Según Navarro, el caso es particularmente complejo, ya que incluye información clasificada que se presentará como prueba.
El fiscal también advirtió sobre la peligrosidad del acusado, describiéndolo como uno de los criminales más peligrosos del narcotráfico, con un “ejército de pistoleros” a su disposición que ha cometido numerosos asesinatos, incluyendo militares, policías, narcotraficantes rivales y miembros del propio Cártel de Sinaloa.
Zambada se declara no culpable
Zambada García se mostró visiblemente nervioso al declararse no culpable
Durante la audiencia, que duró alrededor de 20 minutos, Zambada García se mostró visiblemente nervioso
Moviéndose inquieto en su silla giratoria y llevando sus dedos a la boca, como mordiéndose las uñas.
A su lado, su abogado Frank Pérez observaba atentamente, mientras que al frente, un equipo de aproximadamente 20 fiscales federales,
Junto con asesores y más de una decena de agentes de la DEA, ICE y FBI, seguía de cerca el procedimiento.
La sala de la corte no pudo acomodar a los más de 25 reporteros que llegaron desde la madrugada para cubrir la audiencia, quienes no pudieron ingresar debido a la falta de espacio.
El fiscal Navarro hizo hincapié en que Zambada García ha estado bajo la custodia de autoridades estadounidenses por primera vez, después de décadas en las que tanto las autoridades mexicanas como las estadounidenses habían intentado sin éxito su captura.
La detención del capo tuvo lugar el 25 de julio, cuando llegó a Santa Teresa, Nuevo México, a bordo de un avión privado en compañía de Joaquín Guzmán López, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán.
El juez Cho decidió aceptar la solicitud de no realizar un juicio rápido, permitiendo que Zambada García permanezca en una prisión federal mientras se desarrolla el proceso judicial.
El caso de Zambada requiere de tiempo
Navarro reiteró que el caso es de gran complejidad y que la presentación de pruebas requerirá tiempo.
Dado el volumen de evidencias relacionadas con narcotráfico de cocaína, marihuana, heroína y fentanilo, así como lavado de dinero y portación de armas.
Al finalizar la audiencia, Zambada García respondió al juez Cho que comprendía la complejidad de los cargos en su contra.
Además, reiteró su declaración de no culpabilidad.
Tras esto, el acusado fue asistido por alguaciles para levantarse de su asiento y, rengueando, salió de la sala para ser nuevamente esposado.
La próxima audiencia formal de presentación de cargos se llevará a cabo el 31 de octubre a las 12 del mediodía, hora de Nueva York.
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