POSVERDAD, MENTIRA PERVERSA: En el año 2010, David Roberts, periodista
norteamericano inventó el término “posverdad” y la describió como la distorsión
deliberada de la verdad con fines políticos o ideológicos. Si bien la acción que señala es
tan antigua como la propia humanidad y está infiltrada en todos los ámbitos religiosos,
políticos y sociales, el término se popularizó a partir del año 2016, cuando fue elegida como
palabra del año por el diccionario Oxford.
Esto se debió a dos fenómenos político-económicos y a la proliferación de las ¿benditas?
redes sociales, que han sido el principal medio de penetración de estas falacias. El primer
fenómeno, el más importante para la economía fue el llamado BREXIT, momento clave en
la popularización del término “. Durante la campaña del referéndum sobre la permanencia
del Reino Unido en la Unión Europea en 2016, ambas partes utilizaron afirmaciones
engañosas o directamente falsas, lo que llevó a un debate público muy polarizado y a
menudo basado en emociones. De hecho, la mayoría de los hoy arrepentidos votantes a
favor de la salida de la Unión Europea, ni siquiera contestaron la pregunta del referéndum,
lo que demostró que la ignorancia y el fanatismo, son un ejemplo destacado de cómo la
verdad objetiva había perdido influencia en la opinión pública, dando lugar a la era de la
posverdad.
El segundo fenómeno fue el Triunfo de Donald Trump Durante las elecciones
presidenciales de Estados Unidos en 2016, el entonces candidato fue criticado por utilizar
afirmaciones falsas o engañosas de manera regular. Muchas de estas afirmaciones fueron
verificadas por organizaciones de verificación de hechos y encontradas como falsas o
engañosas, pero esto no impidió que Trump las repitiera y las promoviera a través de sus
canales de comunicación, incluyendo su cuenta de Twitter.
Trump inició su campaña insistiendo que el presidente Barack Obama no había nacido en
Estados Unidos (una afirmación que había sido desacreditada muchas veces), su
afirmación de que había visto a miles de musulmanes celebrando en las calles de Nueva
Jersey después del atentado del 11 de septiembre de 2001 (una afirmación que también fue
desmentida por múltiples fuentes), y su afirmación de que había perdido el voto popular
debido a un fraude electoral generalizado (una afirmación que no tenía base en hechos
objetivos).
Esto visto por muchos como un ejemplo de cómo la posverdad había ganado terreno en la
política estadounidense. Además, la elección de Trump en sí misma, a pesar de las muchas
afirmaciones falsas y controversiales que había hecho durante su campaña, fue vista por
algunos como una prueba de la creciente influencia de la posverdad en la opinión pública.
El resto del mundo no canta mal las rancheras. Los líderes populistas suelen utilizar la
técnica de las posverdades para presentarse como víctimas de una élite que controla el
poder económico y político, y para responsabilizar a grupos o individuos específicos de
los problemas económicos y sociales del país. También pueden exagerar o tergiversar
datos y estadísticas para respaldar su argumento y crear una imagen de ellos mismos
como salvadores del pueblo.
SIEMBRA CIZAÑA, QUE ALGO QUEDA: La posverdad apela a emociones como el
miedo, la ira y la frustración, y pueden ser difundidas rápidamente a través de las redes
sociales y los medios de comunicación que comparten ideologías similares. Destaquemos
unas generales:
- “Irak está construyendo armas nucleares”.
- “Las vacunas causan autismo”.
- “El cambio climático no es real o no es causado por la actividad humana”.
- “Todos los medios de comunicación son deshonestos”.
- “Conmigo se acabó la corrupción”.
- “El bloqueo de Norteamérica nos estancó económicamente”.
- “El libre comercio es perjudicial para la economía local”.
- “El salario mínimo aumenta el desempleo”.
- “La austeridad es la única solución para reducir la deuda pública.
10.“La vacuna contra el COVID-19 puede causar efectos secundarios graves y no es
segura”. - “Eso era antes”.
12.“Es gente buena, yo la conozco”.
13.“Las noticias falsas o “fake news” son una herramienta común utilizada por los
medios de comunicación para manipular la opinión pública.
EL CASO VENEZOLANO, NADIE ESCARMIENTA EN CABEZA AJENA: En todos
estos casos, y muchos otros, existen redes de perversión que aprovechan la ignorancia
(no falta de inteligencia) y el poco acceso al conocimiento de mayorías ingenuas o
desinformadas que son cooptadas ideológica o económicamente. Tomemos por ejemplo a
Venezuela, que pasó de ser el país más rico de Latinoamérica a ser uno de los más pobres
del mundo, en menos de 20 años, con la difusión y ¡aceptación! del uso de posverdades
como:
Negación de la crisis humanitaria: Maduro ha negado repetidamente la existencia de una
crisis humanitaria en Venezuela, a pesar de las pruebas que muestran la escasez de
alimentos, medicinas y otros suministros esenciales.
Blame shift (culpar a los demás): Maduro ha culpado a otros países, incluyendo a los
Estados Unidos y a Colombia, por los problemas económicos y políticos de Venezuela, en
lugar de reconocer la responsabilidad de su gobierno.
Falacias ad hominem (atacar sin refutar argumentos): Maduro ha desestimado a los
oponentes políticos y críticos, calificándolos de “traidores” o “agentes del imperialismo”,
en lugar de responder a sus críticas y argumentos.
Desinformación: Maduro ha difundido información falsa o engañosa sobre las políticas del
gobierno y los problemas del país, incluyendo estadísticas infladas y promesas
incumplidas.
Estas acciones planeadas rigurosamente han permeado, no solo en los regímenes
populistas, pero en ellos han sido más notables por el afán de generar pobreza para
mantener el poder, ya que pueden influir en la opinión pública y en la percepción de la
realidad política y social del país, incluso si no están respaldadas por hechos objetivos y
verificables. ¿A alguien le han informado el costo-beneficio real de cancelar el aeropuerto
de Texcoco? O, ¿Por qué, si ya costó casi el doble de lo previsto, la refinería Olmeca no
produce una gota de combustible, a pesar de que fue pomposamente inaugurada? Los
ejemplos abundan y el resultado asusta.
DE FONDO: La FED aumentó otros 25 puntos base la tasa primaria de interés, prueba,
para ellos, de que no han dominado la inflación. Ahora enfrentan un problema ingente, han
tocado el techo de su deuda pública, 31.2 billones de dólares y, ante la inminente campaña
electoral, los republicanos se niegan a aceptar una ampliación a no ser que se tomen
medidas restrictivas que acabarían con 790 mil empleos, principalmente de los migrantes.
¡Pongamos atención a las remesas!
DE FORMA: A pesar de las restricciones en el consumo, el incremento del desempleo y
las reducciones salariales que la FED ha provocado para reducir la inflación en los Estados
Unidos, las remesas a México siguen siendo superiores a los 5 mil millones de dólares
mensuales. Sería bueno hacer un análisis de origen-destino ya que, en algunos países, se
ha comprobado que la delincuencia usa este sistema para transferir dinero de forma
encubierta, ocultando la verdadera fuente de los fondos. En casos poco transparentes, se
envía dinero a través de cuentas bancarias falsas o se usan intermediarios que faciliten la
transferencia de los fondos de forma ilegal.
DEFORME: La forma ilegal y topillera en que los Senadores de un solo partido aprobaron
20 reformas a las leyes vigentes, sin el menor respeto a normas y reglamentos. Las leyes
emanan del pueblo, pero éste no es consultado y si profundamente afectado, y engañado.
Esperamos que funcione la Suprema Corte y realmente haga Justicia.