MC… ¿Qué podemos decir de MC sin herir demasiadas susceptibilidades?
Movimiento Ciudadano, en Puebla, ha recibido por muchos, muchos años, desde su nacimiento como Convergencia, el tratamiento de una franquicia cuyo único objetivo es llevar a una diputación local a su dirigente en turno. Por mucho tiempo fue el caso de José Juan Espinosa, luego de Nacho Alvizar, de José Ángel García, hasta llegar al día de hoy con Fernando Morales.
En el sentido estricto, ha cumplido con su objetivo.
Pero ¿Movimiento Ciudadano no debería aspirar a más?
Porque la marca es buena, es muy buena, diría yo. Su agenda aborda temas que ningún otro partido se atreve a abordar: el aborto; la legalización de la marihuana para uso lúdico; en materia de ecología, su agenda es más verde que la del Partido Verde; pugnan por detener de tajo la “austeridad machista”, que no es otra cosa que este recorte asesino al presupuesto de programas y políticas públicas que pretendían disminuir la violencia en contra de las mujeres y, en general, que pugna por las libertades y los derechos de las personas.
A mí me parece una gran agenda, pero ¿qué demonios les pasa que en Puebla siguen valiendo exactamente lo mismo que hace veinte años?
A nivel nacional MC ha logrado hacerse de las gubernaturas de dos de los estados más importantes del país, Jalisco y Nuevo León. Quiero aclarar que no voy a calificar el desempeño de los gobernantes, voy a enfocarme en la lógica operativa y electoral de Dante Delgado.
Si somos medianamente observadores, el senador Dante Delgado Rannauro, ha generado proyectos regionales que le han permitido ganar plazas importantes. Primero Jalisco, luego Nuevo León y estuvo a nada de ganar Campeche.
Si es que esto ya les hace sentido, prosigo.
Esta estrategia les habría permitido trazar un triángulo imaginario sobre el mapa de México y, teniendo esos tres puntos seguros, lo que seguía era ganar la mayor cantidad de plazas posibles al interior de este triángulo en 2024, para así consolidar su avance territorial hacia el centro del país y sentar las bases para poder pelear con estructura, recursos y gobernantes naranjas, la presidencia del 2030.
Porque para mí está bastante claro, Dante Delgado iba a repetir el modelo que ya le rindió frutos.
Pero no ganaron Campeche y, peor aún, hasta el momento ningún otro estado representa para el partido que se anuncia como “la tercera vía”, ese punto ancla que permita configurar el proyecto “macrorregional”, que pudiera llevarlos a contender de manera sólida por la presidencia en el 2030.
Porque tengan una certeza, Luis Donaldo Colosio será el candidato a la presidencia en ese año y, seguramente presidente, pero hay que crear la estructura que se los permita, o ¿ustedes creen que el “mito” alcance para llevar al joven Colosio a la presidencia? Yo no.
¿Y Puebla en qué abona? En lo mismo de siempre, una, tal vez dos plurinominales locales en el mejor escenario y unas cuantas presidencias municipales… Lo de siempre.
¡Para que la vida te trate diferente, hay que abordarla de manera diferente, señor Senador y el 2030, que es el verdadero objetivo, está en riesgo! ¿O no?
Sí está más que probado que la estrategia -si tiene alguna- de Fernando Morales, su actual coordinador, no ha rendido frutos.
Si está más que comprobado que la figura de su respetable padre, Don Melquiades Morales, ya no tiene el arrastre que tuvo en los noventa. Porque prácticamente ya pasaron 30 años desde que él y “los Tenebras” lograron hacerse de la gubernatura.
Si está más que claro que lo que han hecho no ha dado resultados, ¿no sería hora de reinventar el modelo?
Si dentro de la cantera de MC hay personas talentosísimas, con gran preparación, energía y empuje, ¿por qué no darles una oportunidad? Es más, si es que no ven las joyas que tienen en casa, les voy a señalar a una: Marisol Calva.
Ahí se los dejo de tarea.