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De manifestantes, bloqueos y secuestros colectivos en Puebla

De manifestantes, bloqueos y secuestros colectivos en Puebla
De manifestantes, bloqueos y secuestros colectivos en Puebla

Puebla ya es un circo, ¿a poco no? Vivimos entre manifestantes, bloqueos y secuestros colectivos de grupos con interses particulares específicos que nada tienen que ver con los de la mayoría.

Quitando de la ecuación a los vecinos afectados por la instalación de parquímetros, porque desde campaña todos escuchamos la promesa de Pepe Chedraui de revisar la concesión y hacer mesas de trabajo con la ciudadanía para conocer su opinión, cosa que nunca sucedió, el resto de las manifestaciones han sido operadas por grupos con intereses particulares y específicos.

Antorcha Campesina que no planea perder su capacidad de generar ingresos independientes a las cuota que le cobra a sus agremiados, con negocios como las concesiones de transporte público que comenzaron a entregarles desde el marinismo.

La UPVA 28 de Octubre que tampoco quiere perder no solo sus negocios lícitos sino también los que hace fuera de la ley. Por ejemplo, extorsionando a automovilistas en la zona del Estadio Cuauhtémoc o con unidades piratas de transporte público.

¿Y qué decir de los taxis piratas que se convirtieron en manifestantes? Que no pagan a una plataforma que los pueda sensar, que no cuentan con permisos de las autoridades, no tributan, no otorgan seguros y además trabajan al margen de la ley.

En la Ciudad de México tampoco venden piñas, deberías leer: Marcha de maestros de la CNTE paraliza el AICM.

¡Ah, pero eso sí, estos grupos cierran vialidades para exigir que los dejen trabajar, no permitiendo que el resto de la ciudadanía llegue a trabajar!

¿Cuántas personas que se dirigían a sus trabajos en la Atlixcáyotl perdieron el día?

¿Cuántos niños y jóvenes no pudieron llegar a clases?

¿Y quiénes perdieron citas médicas?

¿Así es como quieren que los escuchen?

Si esto les parece mucho, recordemos el secuestro colectivo en el Congreso de Puebla la semana pasada. Operado, presuntamente, por el contralor de Ciudad Serdán, Raúl Alducin, al que Uruviel N. le dio la oportunidad de dejar el negocio familiar, una taquería, para convertirse en funcionario municipal desde el trienio anterior.

Los más informados lo señalan como el responsable de movilizar a una treintena de funcionarios operativos de los Ayuntamientos de Chalchicomula de Sesma y de Tlachichuca a los que hicieron pasar por “ciudadanos inconformes”.

Claro, había que exigir su liberación porque tener vínculos con ejecuciones de militares y policías, además de secuestros y varias ocupaciones extracurriculares más de ese estilo, es cosa menor.

Mientras tanto, al interior del Legislativo, permanecían legisladores, personas empleadas y no empleadas. Además de trabajadores de los medios de comunicaciones y hasta un bebé, sin que se les permitiera recibir líquidos o alimentos desde afuera.

Volviendo al relajito de hoy, agreguen a los dueños de autos chocolate que también decidieron cerrar el Periférico.

¿Y nuestro derecho a la movilidad?

¿Y nuestro derecho a trabajar?

¿Por qué pueden venir a manifestantes a hacer bloqueos, cierres y secuestros colectivos a Puebla cuando se les antoja? ¿Se creen con el derecho de darnos en la madre a todos los demás?

Si piensan que con eso ganan la simpatía de las y los poblanos, o que consiguen el apoyo de todos, están muy equivocados.

Hablemos de las cosas como son: estos grupos no están defendiendo los derechos de todos, solo el modus vivendi de sus líderes.

Ahora la pregunta del millón es, ¿hasta cuándo vamos a tener que soportar esto?

Te invito a leer mi columna de ayer:

regreso a clases
Itandehui Rodríguez

Itandehui Rodríguez

Poblana, tutora de Monólogos de Ménade, responsable de lo que dice y hace y no de lo que le inventa. Resiliente, en constante reinvención y en una relación.