Viaja a Puebla
Posted inComo dicen en mi pueblo

El mejor dictamen es con el muerto sobre la plancha

El dictamen es con el muerto en la plancha
El dictamen es con el muerto en la plancha

Les deseo por estas líneas un increíble inicio de semana, sin duda me he ausentado a propósito en esta etapa, porque es mejor analizar los hechos que las especulaciones; en pocas palabras como haría cualquier forense, el mejor dictamen es con el muerto sobre la plancha, al menos es lo lógico cuando se busca la razón verdadera de la causa de la muerte de un ser vivo.

Si me preguntan, sí los partidos son un ser vivo. Por lo menos hasta hoy socialmente en México, todo salió casi en lo presupuestado. La alianza retiene el bastión de los Moreira, pero pierde el estado más populoso en cuanto a población. Lo hace, no de la manera que ellos creían, con una elección arrolladora; sino con una elección compleja que demuestra que la participación social está mas organizada que los partidos políticos en México, pero que uno, no es suficiente sin la otra.

Por ahora no son nada sin crear sinergia política, como ya se vio, la razón es que la sociedad civil no puede depender de las zonas metropolitanas para enfrentar al poder; pero tampoco la zona urbana puede vivir de la autoorganización, ya que cuando mucho solo se verá representada en el legislativo, pero no en el poder ejecutivo. Ya demostraron que pueden ser contrapeso; pero no ser gobierno y eso es complejo en un sistema político como en el que vivimos, en el que los poderes ejecutivos desafortunadamente son el sol y la luna a la idea de los ciudadanos

México no es, no ha sido y por lo visto en el futuro inmediato no será una democracia sólida o popular en su formación política. Es una pluralidad organizada desde el poder público; con la misma nomenclatura gobernante, no hemos consolidado una opción política que aglutine el esbozo de un proyecto que como mexicanos nos aglutine y organice. Seguiremos siendo, en las palabras de Vargas Llosa, una dictadura perfecta.

No importa que hoy gobierne la “izquierda” estamos viviendo la falacia más hermosa del demagogo más conspicuo. Hacer que todo parezca ser lo que ya o somos para hacer pensar a la gente del exterior que somos lo que nunca fuimos, que es una democracia, somos una simulación política y así lo debemos aceptar; absurdamente los que hoy dicen que son diferentes; son la misma nomenclatura de la que un sector social se quejó, la razón es simple los políticos volvieron a rebasar a la sociedad vendiendo lo mismo pero ahora más barato. Con Fox fue el cambio, con Calderón la continuidad, con Peña un intento de corrección, con el Obradorato es el resumen de todo, para llegar a lo mismo y en algunos casos con resultados peores.

Hoy el Presidente de forma popular nos puede regresar a los 70, en la época en que todo vive y muere en la silla del águila. Demostró que puede poner una vaca y esa vaca si es popular o por lo menos la logra identificar con el sector ciudadano bien aceitado con programas sociales, pues gana. No importa el cambio, porque hoy sigue siendo igual el clientelismo, que solo los vuelva a ver en las elecciones con otra bandera, pues es es otra cosa; el infeliciaje social tiene precio y el Presidente lo puede pagar y lo mejor, lo paga con el dinero del ciudadano; no le salieron definitivamente los números en la demoscopia donde dice que es él bien amado, ya que ni es tan querido ni es fácil imponer ese criterio, pero aún es posible ganar elecciones y mientras eso funcione, para AMLO está bien.

Andrés Manuel el político hoy ya sabe que tiene que evitar una ruptura política en su partido, por suerte los que piensan en su grupo político son los menos y muchos si no es que todos aceptarán su voluntad, hoy ya es claro que competir solos no pueden, necesitan el aura de Andrés; hoy también nos quedó claro que es los ciudadanos contra la voluntad del Presidente, por encima de los partidos, pero el Presidente va ganando, tampoco seamos inocentes; como dirían en mi pueblo les diría a los opositores; todos o en bola; ¡siguen derrotados! no importa que la ley o un tribunal les dé la razón; recuerden que tarde o temprano la ley puede cambiarse y entonces perderán también la razón, solos o en bola los partidos están derrotados y lejos de los ciudadanos, es la verdad,  sé que no es una frase agradable, pero decir o escuchar la verdad jamás lo es, si no entienden que hoy sin poder ejecutivo no son nada en una sociedad tlatoanísta como los mexicanos; pocos días en el futuro podrán lograr ser algo.

Que tengan un excelente inicio de semana y ya saben nos vemos en las redes;

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Humberto Aguilar Sarao

Humberto Aguilar Sarao

Abogado, tepeaquense, analista político por elección y emprendedor, comprometido con Puebla.