La mañana de este martes 3 de septiembre, cerca de 700 trabajadores del Poder Judicial bloquearon los accesos a la Cámara de Diputados en San Lázaro, en un esfuerzo por impedir la discusión de la reforma judicial impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Esta iniciativa busca modificar la forma en que se eligen jueces, magistrados y ministros, proponiendo que sea por voto popular.
Desde las 04:00 horas, los manifestantes, en su mayoría pertenecientes a la Asociación Nacional de Magistrados de Circuito y Jueces de Distrito del Poder Judicial de la Federación, cerraron los accesos a la Cámara y afectaron las vialidades circundantes.
A las 10:00 horas estaba programada la sesión en la que se discutiría la reforma, pero los bloqueos impidieron que los legisladores ingresaran al recinto.
El coordinador de la bancada de Morena, Ricardo Monreal, advirtió que la reforma judicial será aprobada, aunque no descartó trasladar la sesión a una sede alterna para evitar más confrontaciones.
“No queremos provocar un enfrentamiento, no vale la pena, nosotros somos pacifistas”, señaló Monreal. A pesar del bloqueo, Morena y sus aliados PT y PVEM pretenden aprobar la reforma, por lo que evaluaron otras opciones, como sesionar en un hotel o en alguna de las sedes alternas disponibles.
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Durante la mañana, algunos diputados intentaron ingresar a San Lázaro, pero fueron recibidos con empujones y gritos por los manifestantes.
Ante esta situación, Monreal pidió a sus compañeros legisladores no forzar su ingreso.
“Les he pedido a mis compañeros diputados y diputadas que no intenten ingresar, que dejen a la gente manifestarse porque hay varias calles que no permiten el acceso ni peatonal ni vehicular”, comentó.
A pesar de las tensiones, Monreal aseguró que la reforma judicial seguirá adelante:
“Queremos discutir civilizadamente con racionalidad política y fundamentos, porque esta reforma va, porque así fue como nos lo indicó el pueblo de México en las urnas”.
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