Durante las primeras horas del 15 de noviembre de 2024, el Servicio Sismológico Nacional reportó una considerable actividad sísmica en varias regiones de México. Aunque la mayoría de los movimientos telúricos fueron de baja magnitud, algunos destacaron por su intensidad y ubicación, particularmente en Oaxaca, Baja California Sur y Tlaxcala.
En la región del Istmo de Tehuantepec, Oaxaca, se registraron dos sismos significativos.
Sismos 15 de noviembre
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El primero, de magnitud 4.1, ocurrió a las 05:10:54, con epicentro 46 km al noreste de Unión Hidalgo y una profundidad de 109.7 km.
Minutos antes, a las 04:32:59, un sismo de magnitud 4.0 sacudió la costa, localizado 28 km al suroeste de Salina Cruz, con una profundidad superficial de 7.7 km, que pudo percibirse en áreas costeras.
En Baja California Sur, específicamente en San José del Cabo, se reportó una serie de pequeños sismos entre las 00:57 y las 04:29.
Estos movimientos, con magnitudes que oscilaron entre 1.2 y 2.7, tuvieron profundidades que variaron de 4.5 km a 11.8 km. Aunque no se registraron daños, esta actividad refleja la constante dinámica tectónica de la región.
En Tlaxcala, se reportaron cuatro sismos de baja magnitud en las cercanías de Tequixquitla.
Los más destacados fueron uno de magnitud 3.0 a las 04:03:39, con una profundidad de 8.9 km, y otro de 2.7 a las 04:04:23, con una profundidad de 4.9 km. Ambos ocurrieron al sureste de esta localidad, en una zona habitualmente activa.
Otros movimientos significativos se registraron en Michoacán, Veracruz y Guerrero. Entre ellos, un sismo de magnitud 3.8 a las 02:57:21, localizado 81 km al suroeste de Pinotepa Nacional, Oaxaca, con una profundidad de 17.1 km, destacó por su mayor intensidad en la costa del Pacífico.
Las autoridades recalcan la importancia de seguir protocolos de seguridad ante sismos, especialmente en regiones con actividad recurrente.
Asimismo, invitan a la población a mantenerse informada a través de fuentes oficiales y participar en simulacros para reforzar su preparación.
El monitoreo sísmico continúa, garantizando la vigilancia de estas zonas activas para salvaguardar a los habitantes.