Lo que comenzó como una posible alianza estratégica entre dos de los magnates más influyentes del mundo, el mexicano Carlos Slim y el sudafricano Elon Musk, ha derivado en un enfrentamiento público que ha captado la atención global. El conflicto resultó luego de que los empresarios se señalaran mutuamente de negocios fallidos y movimientos geopolíticos.

¿Cómo inició el conflicto entre los empresarios?

El origen de la discordia se remonta a octubre de 2024, cuando América Móvil, la gigante de telecomunicaciones de Slim, exploró una colaboración con Starlink, la empresa de internet satelital de Musk. El objetivo era revender los servicios de Starlink a través de la red de Slim, potenciando la conectividad en América Latina.

Debrías leer: ¿Guerra desde el aire? Elon Musk insinúa ataques con drones a carteles mexicanos

Sin embargo, las negociaciones se desplomaron cuando Slim optó por invertir 22 mil millones de dólares en su propia infraestructura, priorizando torres, plantas y fibra óptica sobre una dependencia externa. Esta decisión, según reportes, habría generado una pérdida estimada de 7,500 millones de dólares en las acciones de las empresas de Musk, desatando tensiones entre ambos.

El punto de inflexión llegó en enero de 2025, cuando Musk compartió en X una publicación de @WallStreetMav que insinuaba, sin pruebas, que la fortuna de Slim –valuada en más de 70 mil millones de dólares– estaba ligada a “nexos con cárteles de la droga en México”. El magnate sudafricano acompañó el mensaje con un emoji de monóculo, avivando especulaciones sobre su postura.

Slim reaccionó

La reacción de Slim no se hizo esperar: canceló cualquier plan residual con Starlink y redirigió sus proyectos hacia socios europeos y chinos, como AST SpaceMobile, en un movimiento que algunos interpretan como un golpe estratégico contra Musk.

El enfrentamiento tomó un tono más personal cuando Slim, en una conferencia el 10 de febrero, expresó escepticismo sobre los planes de Musk de colonizar Marte para 2028 o 2030, apostando un dólar simbólico a que no lo logrará. Musk respondió en X con un video titulado “Puesta a Marte”, reafirmando su ambición espacial y desafiando tácitamente al mexicano. Este intercambio ha polarizado opiniones: mientras algunos ven en Slim una defensa de la soberanía empresarial mexicana, otros critican a Musk por sus acusaciones infundadas.

Ruptura entre Carlos Slim y Elon Musk debilita a Starlink

El impacto trasciende lo personal. La ruptura ha debilitado la expansión de Starlink en América Latina, un mercado clave, y ha abierto la puerta a una mayor influencia de China en la región, algo que preocupa a Estados Unidos, donde Musk ocupa un rol en el gobierno de Donald Trump como titular del Departamento de Eficiencia Gubernamental. En contraste, Slim consolida su posición con una estrategia que prioriza la independencia tecnológica.

Este choque de titanes no solo refleja diferencias de visión empresarial, sino también tensiones geopolíticas y egos colosales. Mientras Musk enfrenta el reto de recuperar terreno perdido, Slim emerge como un jugador dispuesto a redefinir las reglas del juego global. La pregunta ahora es cuánto más escalará esta batalla y quién saldrá victorioso en un duelo que ya ha transformado el tablero de las telecomunicaciones.

Te recomendamos:

regreso a clases
Itandehui Rodríguez Martínez

Itandehui Rodríguez Martínez

Poblana, tutora de Monólogos de Ménade, responsable de lo que dice y hace y no de lo que le inventa. Resiliente, en constante reinvención y en una relación.