El exlíder del Cártel del Golfo, Osiel Cárdenas Guillén, salió en libertad este 30 de agosto de 2024 del Centro Penitenciario de Alta Seguridad de Terre Haute, en Indiana, tras cumplir una sentencia reducida que comenzó en 2007.
Cárdenas Guillén, de 57 años, fue arrestado en México en 2003 y extraditado a Estados Unidos en 2007, donde en 2009 se declaró culpable de cinco cargos relacionados con narcotráfico, lavado de dinero y amenazas a dos agentes federales estadounidenses.
En 2010, la jueza federal Hilda G. Tagle lo sentenció a 25 años de prisión. No obstante, su condena se redujo debido al tiempo que pasó encarcelado en México y por su buen comportamiento en prisión.
Durante la audiencia de su sentencia, el exlíder criminal ofreció disculpas a México y Estados Unidos, así como a su familia, reconociendo los errores de su pasado y expresando arrepentimiento por el daño causado.
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Ahora en libertad, Cárdenas Guillén podría enfrentar nuevos retos legales. Las autoridades estadounidenses podrían deportarlo a México, donde aún enfrenta acusaciones por crimen organizado y tráfico de drogas. Alternativamente, podría permanecer en EE.UU. bajo libertad supervisada.
Amparo concedido en México
En México, Cárdenas Guillén ha buscado asegurar su libertad. En febrero de este año, el magistrado Jorge Mario Montellano Iturralde, del Primer Tribunal Colegiado de Apelación del Segundo Circuito, otorgó un amparo a su favor en un proceso penal relacionado con posesión de armas.
Aunque los delitos por los que se le persigue en México prescribieron tras su extradición, el tribunal ha ordenado una revisión del caso para determinar su situación legal en el país.
El destino del excabecilla del Cártel del Golfo sigue incierto, ya que las autoridades de ambos países tendrán que decidir sobre su futuro, ya sea bajo supervisión en Estados Unidos o enfrentando cargos en México.
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