En las primeras horas del 10 de julio de 2024, México experimentó una serie de temblores de baja a moderada magnitud en diversas regiones del país.
Uno de los sismos más significativos tuvo lugar a las 04:40:38, con una magnitud de 3.9, localizado 34 km al suroeste de Coalcomán, Michoacán, a una profundidad de 53.6 km.
México experimentó una serie de temblores
Poco antes, a las 04:35:33, un sismo de magnitud 3.8 sacudió la región de Salina Cruz, Oaxaca, situándose a 70 km al sur de esta ciudad.
Estos eventos fueron seguidos de un sismo de magnitud 3.3 a las 04:34:51, 55 km al suroeste de Rodolfo Sánchez Taboada, Baja California.
A las 04:28:23, otro sismo de magnitud 3.3 se registró 2 km al sureste de San Antonio de la Cal, Oaxaca, con una profundidad de 71.9 km.
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Asimismo, a las 04:17:08, un sismo de magnitud 3.2 se sintió 10 km al suroeste de Autlán de Navarro, Jalisco, a una profundidad de 47.2 km.
En Chiapas, un sismo de magnitud 3.4 se registró a las 01:27:06, 22 km al noroeste de Motozintla, con una profundidad de 150 km.
La actividad sísmica observada resalta la constante interacción de las placas tectónicas en diversas regiones del país.
Las autoridades locales y el Servicio Sismológico Nacional se mantienen vigilantes ante cualquier eventualidad.
Recomiendan a la población estar preparada y seguir las indicaciones de protección civil.
México es una región sísmicamente activa, y estos eventos subrayan la importancia de la preparación y la educación en respuesta a desastres naturales.
La población debe mantener la calma durante un sismo, identificar las zonas de seguridad en el hogar y lugar de trabajo.
Así como tener a la mano un kit de emergencia con suministros básicos.
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