En una conferencia de prensa matutina, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) anunció la intención de enviar al Congreso una iniciativa de reforma laboral que tiene como objetivo que el gobierno federal participe en el pago de pensiones, asegurando así que los trabajadores se jubilen con su último sueldo.
AMLO destacó la necesidad de corregir los efectos negativos de la reforma a las pensiones aprobada durante el sexenio de Ernesto Zedillo en 1997.
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Advirtió que esta reforma generará una crisis cuando comience a aplicarse, y propuso una solución gradual en colaboración con empresarios y trabajadores.
El mandatario expresó su preocupación por la rebaja en las pensiones, señalando que muchos trabajadores no desean jubilarse debido a la disminución significativa en sus ingresos.
Aseguró que el gobierno asumirá una parte considerable de este desequilibrio, brindando así tranquilidad especialmente a los empresarios.
Ante la pregunta sobre el monto que el gobierno asumirá, AMLO informó que se está realizando una corrida financiera para determinar en cuánto tiempo se resolverá el problema y permitirá que los trabajadores se jubilen con su sueldo último, sin reducciones significativas.
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Reforma laboral buscará proteger el salario mínimo de injusticias pasadas
En el mismo anuncio, el presidente López Obrador reveló que la iniciativa de reforma laboral también buscará garantizar que el salario mínimo no aumente menos que la inflación.
Calificó la situación anterior como “una gran injusticia”, “una infamia” y “una canallada” perpetrada por tecnócratas neoliberales en los últimos 30 años.
El objetivo principal es elevar este criterio a rango constitucional, incorporándolo al artículo 123 de la Constitución.
AMLO destacó la importancia de prevenir que la disminución real del salario mínimo vuelva a ocurrir y aseguró que esta iniciativa será presentada para evitar cualquier repetición de la injusticia sufrida durante los últimos 36 años.
Con estas propuestas, el presidente busca establecer medidas que brinden estabilidad financiera a los trabajadores, al tiempo que genera confianza entre los empresarios al mostrar un compromiso gubernamental con el equilibrio en el sistema de pensiones y la protección del poder adquisitivo de los trabajadores.