En una trágica noticia, el intento de linchamiento por el homicidio de Camila, una niña de 8 años, en Taxco, Guerrero, resultó en la muerte de una mujer y dejó a dos hombres gravemente heridos, uno de los cuales permanece en estado crítico en un hospital local.
Este acto de violencia surgió después de que los tres individuos fueran señalados como responsables del secuestro y asesinato de la pequeña.
La comunidad de Taxco se vio sacudida por la indignación y la furia tras la noticia del asesinato de Camila.
Familiares, amigos y ciudadanos se unieron en bloqueos este jueves 28 de marzo, exigiendo justicia por la tragedia que ha conmocionado a la ciudad.
Las tensiones alcanzaron su punto máximo cuando familiares de la niña identificaron a dos personas señaladas como responsables del crime
Junto con un conductor de taxi, quienes se refugiaban en un domicilio bajo la protección del Ejército Mexicano.
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En un intento desesperado por evitar que escaparan, los manifestantes rodearon la casa y exigieron la intervención de la Fiscalía General del Estado de Guerrero (FGE) para su detención.
La situación escaló cuando los familiares de la víctima sacaron a los tres individuos del lugar y comenzaron a golpearlos públicamente.
Desatando el caos en las calles ante la mirada atónita de las autoridades policiales.
Además de la violencia física, los manifestantes voltearon al menos dos vehículos que pertenecían a los presuntos responsables, dejando en ellos mensajes como “Asesinos” y “Justicia para Cami”, en un acto de repudio hacia los perpetradores del crimen.
El trágico destino de Camila comenzó el miércoles 27 de marzo, cuando fue reportada como desaparecida por sus familiares.
A pesar de los esfuerzos por encontrarla, su cuerpo sin vida fue hallado horas más tarde, sumiendo a la comunidad en la consternación y la rabia.
El caso ha conmocionado a la ciudad de Taxco, que actualmente vive las vacaciones de Semana Santa con una ocupación hotelera significativamente reducida del 26.1%, en comparación con años anteriores donde superaba el 90%.
Este lúgubre suceso ha puesto de manifiesto la urgente necesidad de abordar la seguridad pública en la región y ha dejado una profunda cicatriz en el corazón de la comunidad.
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