En la mañana del 29 de junio de 2023, Thalía llegó a su departamento en Matamoros y vivió una pesadilla inimaginable. Apenas cerró la puerta, una chispa provocó una explosión que envolvió su cuerpo en llamas.
Gritando y corriendo por ayuda, una vecina logró apagar el fuego con una cubeta de agua, salvándola de quemaduras aún más graves. Sin embargo, el 60% de su cuerpo ya había sido consumido por el fuego.
Thalía sobrevive a explosión de gas
Thalía había dejado a sus tres hijos en la escuela y se dirigió a su nuevo apartamento, notando un olor extraño que no pudo identificar. Salvador Martí, periodista y hermano de Thalía, describe el momento crítico:
“Al cerrar la puerta, vio una chispa de fuego en la chapa. Intentó salir, pero el departamento explotó por completo”.
Aunque el apartamento tenía solo instalación eléctrica y no había bombona de gas, Salvador y su equipo descubrieron que una fuga de gas de la empresa francesa ENGIE fue la causa de la explosión.
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Las investigaciones revelaron que el gas llegó al apartamento a través del drenaje, posiblemente debido a fisuras en las tuberías, que permitieron la acumulación de gas en el baño.
A pesar de las conclusiones del peritaje independiente, ENGIE afirmó que los peritajes realizados el día del incidente no detectaron la presencia de gas natural en el inmueble ni en sus alrededores.
Salvador Martí señala una preocupante discrepancia: en los últimos tres años, se han reportado 300 fugas de gas vinculadas a ENGIE, aunque la empresa solo reconoce tres.
“Es un llamado no solamente por justicia, sino por responsabilidad social y empresarial”, declara Salvador. “Los vecinos reportaron olor a gas, pero el personal de ENGIE no tomó las medidas de seguridad necesarias, lo cual evidencia una negligencia”.
Desde la explosión, Thalía ha sido sometida a 15 cirugías y aún le faltan más procedimientos. Ha perdido partes de su cuerpo y su lucha ha dado origen al movimiento “Yo sobreviviente”.
Mientras tanto, ENGIE ha implementado estrategias legales para evitar asumir la responsabilidad, dejando a Thalía y su familia enfrentando no solo las secuelas físicas, sino también los enormes gastos médicos.
En enero de 2022, una explosión similar en una tienda Seven Eleven de Tamaulipas dejó dos víctimas mortales.
Aunque los familiares señalaron a ENGIE como responsable, la empresa se ha deslindado de los hechos mediante amparos, dejando al seguro de la tienda asumir todos los gastos.
La familia de Thalía y otros afectados por incidentes similares continúan su lucha por justicia, pidiendo que ENGIE asuma la responsabilidad por las fugas de gas y las tragedias que han causado.
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