El Senado de la República aprobó este miércoles la reelección de Rosario Piedra Ibarra al frente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) para el periodo 2024-2029.
Piedra alcanzó la mayoría calificada con 87 votos a su favor, dejando atrás a Nashieli Ramírez Hernández, quien obtuvo 36 votos, y a Paulina Hernández Diz, que recibió solo uno.
La votación también registró tres votos nulos.
Reelección de Rosario Piedra en la CNDH
La reelección de Piedra fue recibida como un “regalo de cumpleaños” para el expresidente Andrés Manuel López Obrador, quien había impulsado su primera designación en 2019.
Y como una doble derrota para la aspirante presidencial Claudia Sheinbaum, quien se había manifestado en contra de la reelección en cargos públicos y respaldaba a Ramírez como su candidata para el puesto.
Un proceso polémico y cuestionado
El proceso para la reelección de la titular de la CNDH estuvo marcado por controversias.
En las evaluaciones previas, Piedra Ibarra resultó ser la peor evaluada; sin embargo, fue incluida en la terna final tras la exclusión de Tania Ramírez, quien había obtenido una mejor calificación.
Además, en su expediente se detectó una carta de apoyo falsificada, una irregularidad que la mayoría oficialista minimizó.
A pesar de estas controversias, el bloque de Morena y sus aliados mantuvieron su apoyo a Piedra.
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Mamparas de la discordia, la oposición exige transparencia
La exigencia del Partido Acción Nacional (PAN), liderado por Ricardo Anaya, de realizar la votación bajo condiciones de mayor transparencia desató un intenso enfrentamiento.
Anaya propuso instalar mamparas para que la votación fuera secreta y se entregaran boletas en blanco justo antes de emitir el voto, previniendo posibles presiones.
La bancada de Morena, encabezada por figuras como Adán Augusto López y Gerardo Fernández Noroña, calificó esta medida como una táctica para “complicar” el proceso, desencadenando un intercambio de acusaciones y sarcasmos. Fernández Noroña se refirió a Anaya como “calderoncito” y lo acusó de ser parte de un partido con historial de fraude.
Finalmente, tras varios recesos y enfrentamientos, la votación siguió adelante con el bloque oficialista unificando esfuerzos para alcanzar la mayoría calificada.
Cinco años más para Rosario Piedra
A pesar de las reservas dentro de Morena y el rechazo de algunos de sus propios senadores, el bloque oficialista logró consolidar los votos necesarios para asegurar la reelección de Piedra.
En un movimiento para mantener el apoyo, se convocó a la suplente de la senadora Yeidckol Polevnsky, quien se encontraba ausente, asegurando así la mayoría calificada que necesitaban.
Esta reelección en la CNDH prolonga la presencia de Rosario Piedra en un cargo que ha sido objeto de controversia, especialmente por su afinidad con el anterior gobierno de López Obrador.
Desde la oposición se ha cuestionado la independencia de su gestión, en tanto que para Morena y sus aliados esta ratificación representa una victoria significativa para mantener el liderazgo en derechos humanos en el país.
Con cinco años más en el cargo, Piedra Ibarra enfrentará el reto de fortalecer la CNDH bajo el escrutinio constante de una oposición que cuestiona su imparcialidad.
Asimismode una bancada oficialista que, aunque en su mayoría la respalda, no está completamente unida en torno a su liderazgo.