En las primeras horas del 29 de noviembre de 2024, el Servicio Sismológico Nacional (SSN) reportó una serie de sismos en distintas regiones de México, destacando la actividad sísmica en estados como Oaxaca, Baja California y Guerrero.
Estos eventos, aunque de baja magnitud, evidencian la constante interacción de las placas tectónicas que afectan al territorio nacional.
Sismos en México este 29 de noviembre
Uno de los movimientos más relevantes ocurrió a las 04:21 horas, con una magnitud de 3.8, localizado 29 kilómetros al oeste de Tehuantepec, Oaxaca, y una profundidad de 16.8 kilómetros.
Minutos después, a las 04:24 horas, se registró otro sismo de magnitud 3.1 a 77 kilómetros al noroeste de San Felipe, Baja California, con una profundidad de 18.9 kilómetros.
En el estado de Guerrero, a las 04:01 horas, un sismo de magnitud 3.6 fue detectado a 26 kilómetros al norte de Petatlán, con una profundidad de 46.7 kilómetros.
Mientras tanto, en Baja California Sur, la región cercana a San José del Cabo registró varios movimientos menores.
Siendo el más significativo un evento de magnitud 1.4 a las 03:28 horas, ubicado a 5 kilómetros al suroeste de la localidad.
Oaxaca fue el estado con mayor actividad sísmica durante este periodo.
A las 02:37 horas se registró un sismo de magnitud 3.8, con epicentro a 40 kilómetros al suroeste de San Pedro Pochutla, a una profundidad de 8.3 kilómetros.
Otro evento importante ocurrió cerca de Matías Romero, donde un movimiento telúrico de magnitud 3.7.
Fue detectado a las 01:23 horas, con una profundidad de 96.2 kilómetros.
En total, se reportaron 17 sismos entre la medianoche y las primeras horas del día.
Aunque la mayoría de estos eventos no representaron riesgos significativos para la población, las autoridades han reiterado la importancia de mantenerse informados a través de fuentes oficiales.
Además de tener en cuenta las recomendaciones de protección civil.
La población en zonas cercanas a los epicentros debe revisar sus viviendas en busca de posibles daños estructurales.
Contar con un plan de emergencia en caso de movimientos telúricos de mayor magnitud.
Para reportar incidentes o recibir asistencia, se recomienda comunicarse con las líneas de emergencia locales.
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