Durante la madrugada del 21 de diciembre de 2024, se registró una intensa actividad sísmica en distintas regiones de México, según los reportes del Servicio Sismológico Nacional.
Varias zonas del país experimentaron movimientos telúricos de diferentes magnitudes, generando preocupación en la población y destacando la importancia de la prevención ante estos fenómenos naturales.
Durante la madrugada del 21 de diciembre, se registró una intensa actividad sísmica
En Baja California Sur, San José del Cabo fue el epicentro de una serie de sismos menores.
Entre las 00:10 y las 04:42 horas, se detectaron varios temblores de baja magnitud, que oscilaron entre 1.4 y 1.9, con profundidades de entre 8.9 y 11.5 kilómetros.
Aunque estas magnitudes son consideradas leves, la frecuencia de los eventos refleja un patrón constante de actividad en esta región.
Por su parte, en el sur del país, se reportaron movimientos de mayor magnitud en estados como Guerrero, Chiapas, Puebla y Oaxaca. En Guerrero, un sismo de magnitud 3.0 ocurrió a las 03:27, a 4 kilómetros al sureste de Coyuca de Benítez, con una profundidad de 2.4 kilómetros.
En Chiapas, se registraron dos sismos destacados: uno de magnitud 3.8 a las 02:48, a 120 kilómetros al suroeste de Tonalá, con una profundidad de 16.3 kilómetros, y otro de magnitud 3.8 a las 02:27, a 47 kilómetros al suroeste de Huixtla, con una profundidad de 71.5 kilómetros.
En Puebla, un movimiento de magnitud 3.1 ocurrió a las 02:38, a 17 kilómetros al sureste de Chiautla de Tapia, con una profundidad de 51.1 kilómetros.
Oaxaca fue el epicentro de algunos de los sismos más significativos de la jornada. A las 00:30, un temblor de magnitud 3.7 tuvo lugar a 79 kilómetros al sureste de Salina Cruz, con una profundidad de 16.1 kilómetros.
Minutos antes, a las 00:06, otro sismo de magnitud 3.9 se registró a 65 kilómetros al suroeste de la misma localidad, con una profundidad de 10.7 kilómetros. Estos eventos resaltan la constante actividad sísmica en esta región del país.
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A pesar de la intensidad y frecuencia de los movimientos telúricos, las autoridades no han reportado daños materiales ni afectaciones graves en las zonas mencionadas.
Protección Civil se mantiene en alerta, vigilando las áreas vulnerables, mientras que la población ha sido exhortada a seguir las recomendaciones oficiales para mantenerse segura.
Estos eventos recuerdan la importancia de contar con medidas preventivas ante posibles emergencias.
Es fundamental identificar zonas seguras en el hogar, preparar un kit de emergencia con artículos básicos y mantenerse informado a través de fuentes confiables. La prevención y la preparación son clave para enfrentar de manera efectiva los sismos en un país como México, donde la actividad sísmica es frecuente.