Debido a las intensas lluvias en Chetumal, 120 colonias resultaron inundadas, con cortes masivos de energía eléctrica y afectando a mil 564 personas.
Las fuertes lluvias que azotaron Chetumal durante la noche del viernes y la madrugada del sábado dejaron un panorama desolador con más de 120 colonias inundadas.
La ciudad sufrió cortes generalizados de energía eléctrica y mil 564 personas damnificadas, según informó Cristina Torres Gómez, secretaria de gobierno.
Las precipitaciones alcanzaron los 135.2 milímetros, ocasionando pérdidas millonarias en la capital del estado.
Esto, obligó el traslado de familias afectadas a tres refugios habilitados en el CBTIS 253, CBTIS 214 y la secundaria Eva Sámano.
Tras una reunión del Comité Operativo de Inundaciones, Torres Gómez destacó que el fenómeno atípico colapsó alcantarillas y sistemas de drenaje en varios puntos de la ciudad.
El Ejército mexicano puso en marcha el Plan DN-III para brindar asistencia inmediata a los afectados por las inundaciones en Chetumal.
La situación continúa siendo crítica, especialmente en las zonas rurales con acumulaciones de hasta 40 milímetros de agua.
Se han habilitado dos refugios anticiclónicos para albergar a la población más vulnerable.
TAMBIÉN DEBES LEER: Miami bajo el agua
Autoridades de Protección Civil y Conagua advirtieron que las lluvias persistirán debido a tormentas tropicales y canales de baja presión, extendiéndose hasta el jueves 20 de junio.
Además, alertaron sobre una baja presión en el Golfo de México con un 50% de probabilidad de convertirse en ciclón tropical.
Las autoridades exhortan a la población a mantenerse alerta y seguir sus recomendaciones para evitar riesgos mayores ante esta emergencia por inundaciones en Chetumal.
¿En qué consiste el Plan DN-III?
El Plan DN-III es el instrumento operativo de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) dedicado a brindar apoyo y atención inmediata a la población en casos de desastres.
Su objetivo principal es controlar los riesgos, reducir el tiempo de respuesta en operaciones de búsqueda, rescate y evacuación.
Además, proporciona seguridad mediante la instalación de albergues y la prestación de atención médica.
Desde su implementación en 1965, este plan ha sido esencial para optimizar la respuesta del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos frente a eventos catastróficos.
TE PUEDE INTERESAR: