En un incidente que provocó caos y descontento entre los automovilistas, los pobladores de San Matías Tlalancaleca bloquearon la Autopista México-Puebla durante siete horas y quemaron llantas, cerrando completamente la vía en ambos sentidos.
El bloqueo ocurrió a la altura del kilómetro 82, generando filas de tráfico que se extendían por más de siete kilómetros y dejando a numerosos conductores atrapados.
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El motivo detrás de este bloqueo ha sido objeto de especulación, ya que las versiones iniciales apuntaban a que los pobladores exigían la liberación de una persona detenida.
Sin embargo, una segunda versión sugiere que buscaban justicia por la muerte de un residente local.
En respuesta a la situación, personal de la Secretaría de Gobernación en Puebla se trasladó al lugar para iniciar un diálogo con los manifestantes. Después de siete horas de bloqueo, finalmente se logró reabrir la vialidad.
El bloqueo tuvo un impacto significativo en el tráfico y la seguridad de la zona. La Autopista México-Puebla y la carretera federal México-Puebla no se reabrieron hasta aproximadamente las 23:00 horas del viernes.
Durante el período de bloqueo, un grupo de pobladores se apostó en la autopista, en la comunidad de “Palmillas”, lo que resultó en largas filas de vehículos y camiones de carga.
Además, el atasco de vehículos creó oportunidades para varios asaltos en contra de los automovilistas varados, sin que las autoridades pudieran brindar asistencia inmediata.
Este incidente se convierte en el segundo bloqueo más largo en lo que va del año 2023, siguiendo al bloqueo previo por parte de habitantes de Santa Rita Tlahuapan el 10 de junio.
Hasta las 22:30 horas, la autopista había permanecido cerrada por más de seis horas, lo que subraya la creciente preocupación por la inestabilidad y la interrupción de las vías de comunicación en la región.
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