En un acto de violencia que ha conmocionado a la comunidad local, Faustino Hernández Álvarez, presidente de la Unión Ganadera Regional de Sinaloa y excandidato a la alcaldía de Culiacán en las elecciones de 2021, fue asesinado por civiles armados en el fraccionamiento Parque la Alameda, en el desarrollo urbano de Tres Ríos.
Este suceso se suma a una ola de homicidios y saqueos que azotan la región, exacerbando la crisis de seguridad que enfrenta el municipio.
El incidente se registró en la mañana del lunes, cuando la Secretaría de Seguridad Pública del Estado recibió reportes de disparos en la zona.
Al llegar, la Policía Estatal Preventiva confirmó la muerte de dos personas, una de las cuales fue identificada como Hernández Álvarez.
Este asesinato se produce en el contexto de un día trágico, donde se contabilizan cuatro homicidios en Culiacán. Uno de los otros fallecidos fue encontrado en el campo pesquero de las Arenitas, en el nuevo municipio de Eldorado.
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Los actos de violencia continúan en la ciudad, iniciando una cuarta semana de hostilidades que se manifiestan en el hallazgo de más cuerpos sin vida y en la proliferación de saqueos.
Recientemente, se reportó el robo de 25 negocios comerciales y tiendas departamentales, según declaraciones del alcalde de Culiacán, Juan de Dios Gámez Mendívil.
Estos robos se han intensificado ante la inoperancia de la policía municipal, que actualmente enfrenta revisiones de sus armas por parte de la Secretaría de la Defensa Nacional, lo que ha mermado su capacidad operativa.
Asesinan a Faustino Hernández
Además de los asesinatos, las autoridades informaron sobre un cuerpo masculino hallado en el fraccionamiento Infonavit las Flores, también en Culiacán, cubierto con una cobija y sin identificación.
Estos eventos resaltan la urgencia de una respuesta efectiva ante la creciente violencia que afecta no solo a los habitantes de la región.
Sino también a la estabilidad de las instituciones de seguridad pública.
La situación en Culiacán plantea serias preocupaciones sobre la seguridad de los ciudadanos y la efectividad de las autoridades para contener la violencia que ha desbordado a la capital sinaloense.
Con el asesinato de líderes comunitarios como Hernández Álvarez, la inseguridad se torna aún más crítica.
Dejando a la población en un estado de alarma constante y un llamado a la acción urgente por parte de las autoridades.