El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, generó controversia al responder de manera sarcástica a preguntas sobre la reciente ola de violencia en Guanajuato, específicamente en la ciudad de Celaya, donde se registraron ataques armados que cobraron la vida de al menos cuatro personas, incluyendo dos paramédicos y dos policías.
Durante la conferencia de prensa matutina del 23 de abril, López Obrador fue cuestionado sobre la quema de ambulancias en Celaya.
Terrible asesinato en Guanajuato
En lugar de abordar el tema con seriedad, el mandatario aprovechó para criticar al gobierno estatal, dirigido por el panista Diego Sinhue Rodríguez Vallejo, por las altas tasas de homicidios en Guanajuato.
“Muy lamentable lo que sucede en Guanajuato, ya lo hemos hablado durante mucho tiempo. Ahora es en Celaya, fueron dañadas tres ambulancias, se están haciendo las investigaciones, hubo personas que perdieron la vida”, declaró López Obrador, antes de añadir sarcásticamente: “Que vaya Latinus o los de derechos humanos”.
El presidente señaló que Guanajuato enfrenta una grave crisis de seguridad que afecta no solo a la entidad, sino también al país en general.
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Citó estadísticas que indican que Guanajuato registró un alto porcentaje de los homicidios reportados a nivel nacional en un solo día.
Los hechos ocurridos en Guanajuato el 22 de abril incluyeron ataques armados en contra de dos paramédicos en una ambulancia de servicio particular, así como el incendio de dos ambulancias estacionadas en diferentes puntos de la ciudad.
Además, dos policías resultaron heridos en un ataque contra una patrulla en Salamanca, uno de los cuales falleció posteriormente.
Las autoridades locales y estatales han iniciado investigaciones para dar con los responsables de estos actos violentos, mientras que el gobierno de Irapuato condenó los ataques y desplegó dispositivos de búsqueda.
La reacción sarcástica de López Obrador ante la tragedia ha generado críticas tanto en redes sociales como por parte de diversos sectores de la sociedad, quienes consideran inapropiado el tono empleado por el presidente frente a situaciones de grave violencia.