El presidente Andrés Manuel López Obrador lanzó una advertencia este miércoles, anunciando su posible ausencia en la Cumbre de Líderes de América del Norte y exigiendo respeto hacia México por parte de los mandatarios de Canadá y Estados Unidos. Este gesto responde a diversos frentes abiertos en áreas diplomáticas, comerciales y migratorias que han tensionado las relaciones entre los países. AMLO amenaza con su ausencia a la cumbre si no hay respeto para México.
Dejó claro que solo asistirá a la cumbre trilateral si México es tratado con respeto por parte de sus vecinos del norte. Esto surge en respuesta a reportajes publicados por medios estadounidenses que sugieren vínculos de allegados del presidente mexicano con el narcotráfico, así como ante la amenaza de Canadá de reintroducir la visa para controlar el ingreso de mexicanos supuestamente ligados al crimen organizado.
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Estas declaraciones de López Obrador surgen en un contexto de desacuerdo con Washington por el comercio de acero y la demanda de Ottawa para que México refuerce los controles sobre los migrantes mexicanos que llegan a Canadá.
“Si no hay un trato respetuoso, no participo (en la cumbre). Además, ya me faltan nada más siete meses (de mandato) y no me gusta viajar mucho”, afirmó el presidente al ser cuestionado sobre su asistencia a la cita trilateral, programada para abril en la ciudad de Quebec.
¿Qué sucede con el acero?
La secretaria de Economía, Raquel Buenrostro, lanzó una advertencia este martes, anunciando que México responderá con aranceles de represalia a las importaciones de acero provenientes de Estados Unidos si el gobierno estadounidense impone aranceles al acero mexicano. Esta advertencia llega en medio de tensiones comerciales entre ambas naciones.
Buenrostro afirmó en una conferencia de prensa en la Ciudad de México que si Estados Unidos decide imponer aranceles, México tomará medidas equivalentes como represalia. Esta declaración surge después de que Katherine Tai, titular de la Representación Comercial de la Casa Blanca, advirtiera la posibilidad de imponer nuevamente aranceles al acero y aluminio mexicanos si no se toman medidas para frenar el aumento de las exportaciones hacia EE. UU.
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La secretaria de Economía señaló que México cuenta con mecanismos para rastrear las importaciones de acero y determinar su origen, lo que dificultaría cualquier intento de eludir los aranceles mediante triangulación con otros países. Esta postura se suma a los esfuerzos de México por evitar prácticas comerciales desleales y mantener la estabilidad en el sector del acero.
Se intensifican tensiones comerciales: AMLO amenaza con imponer aranceles
Las tensiones comerciales entre México y Estados Unidos se han intensificado en los últimos tiempos, especialmente en el sector del acero. Aunque existe un acuerdo previo que eliminó los aranceles para las importaciones de acero y aluminio de México, Canadá y Estados Unidos, la posibilidad de reintroducir aranceles ha generado incertidumbre en el comercio bilateral.
El gobierno mexicano ha tomado medidas para mitigar los riesgos de comercio desleal, como la creación de fracciones arancelarias para homologar la estructura de clasificación de productos de acero y aluminio con Estados Unidos. Además, se ha actualizado la información de comercio exterior y se han incorporado certificados de molino para mejorar la transparencia en las importaciones.
La próxima participación de México en el Comité Técnico Especializado de Estadísticas de Comercio Exterior busca fortalecer la disponibilidad de información relevante para el análisis del comercio bilateral. Estas acciones reflejan el compromiso de México en mantener relaciones comerciales equitativas y prevenir prácticas desleales en el sector del acero.
Ante la pregunta sobre si la canciller mexicana, Alicia Bárcena, se reuniría con el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, para discutir sobre la negociación abierta respecto a los flujos migratorios desde México, López Obrador respondió afirmativamente, añadiendo que “Ella se hace cargo”.
La amenaza de AMLO refleja la importancia que México atribuye al respeto en sus relaciones internacionales y marca un desafío para los líderes de Estados Unidos y Canadá en la gestión de los asuntos bilaterales y trilaterales en la región norteamericana.