Durante el mandato del presidente Andrés Manuel López Obrador, México ha sido testigo de un alarmante aumento en los casos de abuso sexual, revelando una tendencia preocupante que ha ido en constante ascenso desde el año 2015 hasta el 2024, el abuso está a la alza en Puebla.
Según datos oficiales recopilados, en el período comprendido entre 2015 y 2023, se han denunciado un total de 143,044 casos de abuso sexual en todo el país.
Esta cifra muestra un incremento constante año tras año, siendo especialmente inquietante el desglose anual de los casos.
En el año 2015, se reportaron 11,980 casos, mientras que en 2023 se registraron 35,931 casos, marcando un aumento significativo a lo largo del sexenio.
Sin embargo, el año 2024 parece mostrar un descenso en comparación con el año anterior, con un total de 2,391 casos reportados hasta la fecha.
Al analizar la distribución geográfica de estos incidentes, se destaca que la Ciudad de México (CDMX) y el Estado de México (EDOMEX) encabezan la lista con 20,504 y 20,432 casos respectivamente, seguidos por Jalisco con 15,236 casos, Chihuahua con 8,361 casos y Nuevo León con 7,749 casos.
Puebla a la alza en abusos
Puebla, desafortunadamente, no se queda atrás, con 4,106 casos de abuso sexual registrados.
Estas cifras representan 624 abusos por cada millón de habitantes.
Durante el período mencionado, en 2020 se reportaron 718 casos, en 2021 hubo 828 casos, en 2022 se registraron 933 casos y en 2023 se contabilizaron 915 casos.
Estos datos son un llamado de atención urgente para las autoridades mexicanas, quienes deben tomar medidas efectivas para abordar y prevenir el abuso sexual en todas sus formas.
Conciencia y prevención tras el abuso sexual a la alza en Puebla
Es crucial implementar políticas públicas y programas de educación que promuevan la conciencia y la prevención de este tipo de violencia, así como garantizar el acceso a la justicia y el apoyo a las víctimas.
En un país donde la seguridad y la protección de sus ciudadanos deberían ser una prioridad, el combate contra el abuso sexual debe ser una tarea fundamental para construir una sociedad más segura y justa para todos.
El 8 de marzo se conmemora el Día Internacional de la Mujer, una fecha que trasciende fronteras y culturas, dedicada a celebrar los logros, la fortaleza y el papel fundamental de las mujeres en la sociedad.
Es un día para reflexionar sobre los avances en la lucha por la igualdad de género y para reconocer los desafíos que aún persisten.
En este día, es importante recordar que el Estado tiene una deuda histórica con las mujeres.
Durante siglos, las mujeres han enfrentado discriminación, violencia y desigualdad en todos los ámbitos de la vida.
Han luchado incansablemente por sus derechos y han contribuido de manera significativa al progreso y desarrollo de nuestras sociedades, a menudo en condiciones adversas y con escaso reconocimiento.
El Estado tiene la responsabilidad de garantizar los derechos de todas las mujeres, asegurando su acceso a la educación, la salud, el empleo digno y la participación política.
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También debe tomar medidas concretas para prevenir y erradicar la violencia de género, que sigue siendo una realidad alarmante en todo el mundo.
En este Día Internacional de la Mujer, renovemos nuestro compromiso de trabajar hacia un futuro más justo e igualitario para todas las mujeres.
Reconozcamos su invaluable contribución a nuestras comunidades y sociedad en su conjunto, y sigamos luchando juntos por un mundo donde todas las personas, independientemente de su género, puedan alcanzar su máximo potencial y vivir libres de discriminación y violencia.
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