El caso de trata de personas que la fiscal del estado, Idamis Pastor Betancourt, presentó como el primer gran golpe de su gestión ha comenzado a desmoronarse. Se desmorona el caso de trata de personas en Barra Beer
Kimberly Saldaña Peña, presunta víctima de violencia y explotación sexual en la cervecería Barra Beer, desmintió las acusaciones en contra de su novio y dueño del establecimiento, Ángel.
Asegurando que nunca fue rescatada, sino detenida por la fuerza.
Se desmorona el caso de trata de personas en Barra Beer
No fui rescatada, fui detenida
Durante una visita a las oficinas de e-consulta, Kimberly, de 19 años, reveló que el 3 de enero fue asegurada por agentes de la Fiscalía General del Estado (FGE), la Guardia Nacional y la Policía Municipal, y trasladada contra su voluntad.
Durante 25 días estuvo recluida en el Centro de Justicia para Mujeres, donde afirma haber permanecido incomunicada y sin recibir visitas.
“Me daban tres comidas al día, pero debía lavar siempre la misma ropa. No recibí atención psicológica, solo me indicaron que me citarían hasta el 4 de marzo”, declaró.
Kimberly desmiente agresiones y abuso
La joven negó haber sufrido agresiones sexuales y afirmó que los peritajes médicos confirmaron que estaba en buen estado de salud. “Todos los que me entrevistaron y la doctora que me revisó dijeron que estaba bien, que no me había pasado nada”, aseguró.
Además, describió como un “exceso” el operativo desplegado por la FGE para la detención de Ángel, señalando que en ningún momento se encontraba débil o en peligro.
“Me subieron a la fuerza a la patrulla, yo podía caminar perfectamente, pero no quería subir. Nos dijeron que nos llevarían a la Fiscalía, pero ni siquiera sabía por qué”, explicó.
El origen de la denuncia
Kimberly indicó que la denuncia en contra de Ángel provino de su madre, quien no aceptaba que ella viviera separada de su familia.
Un pariente del dueño de Barra Beer también declaró que, al no poder probar el delito de trata de personas, las autoridades buscaron otras acusaciones en su contra.
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“Cuando vieron que no había pruebas, lo acusaron de abuso sexual”, denunció el familiar.
Además, sostienen que la mujer que ahora acusa a Ángel intentó hacerse pasar por menor de edad, pero la FGE descubrió que mentía. “Su asesor jurídico y ella fueron multados porque se corroboró que la supuesta víctima es mayor de edad”, agregó.
La versión de la FGE
El 3 de enero, la Fiscalía informó sobre la clausura de Barra Beer bajo el folio FGEP/CDI/FEIDVGCM/TRATA-I/000050/2025.
Asegurando que familiares de Kimberly denunciaron que desde el 10 de diciembre habían perdido contacto con ella y que, al visitarla en el bar, notaron que tenía lesiones en el cuerpo.
Sin embargo, Kimberly insiste en que nunca estuvo en peligro y que el caso fue un error de las autoridades.
Mientras tanto, la familia de Ángel teme por su seguridad debido a la estigmatización que enfrenta tras ser acusado sin pruebas contundentes.