En el corazón del Centro Histórico de Puebla, el Templo de Santa Mónica se convierte cada 1 de julio en un epicentro de devoción y alegría. Los fieles católicos de todo México y más allá se congregan para honrar al Señor de las Maravillas, la imagen religiosa más venerada en la ciudad.
El Señor de las Maravillas, una representación conmovedora de Jesús en su agonía.
Es adorado fervientemente por los creyentes que acuden al templo para buscar salud, trabajo y protección, atribuyéndole numerosos milagros a lo largo de los años.
El templo, un magnífico edificio del siglo XVII ubicado en la calle 5 de Mayo y avenida 18 Oriente – Poniente, ha sido testigo de la persistente devoción hacia esta imagen desde que llegó allí a través de una historia de rifa ganada por monjas Agustinas.
Desde entonces, el Señor de las Maravillas ha sido custodiado con amor por generaciones de religiosas.
Creciendo así la historia de fe y devoción que perdura hasta nuestros días.
En 2013, un incendio devastó parte del templo, pero la figura del Señor de las Maravillas permaneció milagrosamente intacta.
Reforzando aún más la fe de los devotos y su veneración hacia esta imagen.
La celebración del 1 de julio es especialmente significativa.
Marcada por misas a lo largo del día, mañanitas tradicionales, y la presencia constante de mariachis que llenan el ambiente con sus melodías.
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Los fieles llegan con flores y ofrendas, expresando así su gratitud por los milagros recibidos y sus peticiones por nuevas bendiciones.
El día se convierte en una mezcla de alegría y espiritualidad, donde miles de personas se unen para compartir su fe y disfrutar de la rica gastronomía local.
Que incluye platillos como mole, tacos y tostadas, ofrecidos generosamente a los asistentes como muestra de hospitalidad y tradición mexicana.
En este vibrante escenario de fe y tradición, el Señor de las Maravillas sigue siendo el centro de una celebración que une a los corazones de los fieles en un acto de devoción y agradecimiento, recordándonos la fuerza de la fe y la belleza de las tradiciones religiosas en Puebla.