Uno de los sitios religiosos más visitados por los poblanos y turistas es el Templo de Santa Mónica, aquí se encuentra el Señor de las Maravillas, considerada la imagen más venerada y milagrosa de Puebla.
Y como se acerca una de sus principales fiestas, aquí te contamos 5 datos que seguramente no sabías.
Basado en el Cristo de las 3 caídas
La imagen del Señor de las Maravillas está basada en el Cristo de las Tres Caídas, que representa el momento en el que Jesús de Nazaret, abatido por el peso de la cruz, cayó por tercera vez mientras caminaba al Calvario.
Señor de l Rayo
“El señor de la caída” también se le llegó a conocer como “Señor del Rayo”, debido a que la madera con que se talló esta imagen procede de un árbol que derrumbó un rayo junto a la parroquia de San José.
Cuenta con 3 fiestas al año
El Señor de las Maravillas cuenta con tres fiestas al año.
- La primera ocurre el tercer viernes de cuaresma, en este día varios devotos acuden al templo a darle gracias o pedirle algún favor.
- La segunda festividad ocurre en Semana Santa, para ser más precisos el Viernes Santo, cuando la figura religiosa sale a las calles durante la procesión con otras imágenes de la zona, como la Virgen de los Dolores, Jesús de Analco, Jesús Nazareno y la Virgen de la Soledad.
- La tercera y más importante es la que se celebra el 1 de julio, donde es tradición que el mariachi cante las mañanitas, mientras afuera hay una gran variedad de antojitos poblanos.
De las imágenes más veneradas
Es de las imágenes más veneradas y esto explica por qué está cubierto de miles de milagros. Estas pequeñas piezas de metal, de diferentes formas, son ofrecidas a un santo, a la Virgen o a Jesucristo a cambio de sanación o de ayuda en situaciones difíciles. Una vez que se ha realizado la petición, se les lleva como agradecimiento el “milagrito”.
Otra historia relatando su nombre
El origen de su nombre se basa en otro relato, que dice que frente del Templo de Santa Mónica había una cárcel y que a esta todos los días acudía una mujer que visitaba a su esposo para llevarle comida.
Durante sus visitas, conoció a un hombre, el cual le contó que nadie iba a verlo y, llena de lástima, la mujer comenzó a llevarle alimentos, pero sin que su esposo lo supiera.
Más tarde, el marido de la mujer fue puesto en libertad, pero ella siguió yendo a la cárcel a visitar al otro hombre.
El esposo sospechó que su mujer le era infiel y decidió esperarla a las puertas de la prisión para comprobarlo.
Tras interceptarla, le preguntó a su esposa qué llevaba en la cesta, a lo que ella respondió “llevo maravillas para el Señor de la caída”.
El marido desconfió de la respuesta, y al abrir la cesta, la comida se había convertido en flores.
Fueron a buscar a la cárcel a aquel hombre, pero nunca lo encontraron y llegaron a la conclusión de que el triste hombre era el Cristo de la Caída.
Los dos ofrecieron las maravillas ante él, y se dice que esta fue una de las razones por las que ahora, la imagen se llama “el Señor de las Maravillas”.
