En un giro inesperado, se ha llevado a cabo la renuncia de los titulares de dos áreas clave y se gesetan cambios en el Poder Judicial. Carlos Palafox Galeana y Margarita Gayosso Ponce han dejado sus cargos, generando un cambio en la estructura de poder en esta institución.
Durante una sesión plenaria del Tribunal Superior de Justicia, se formalizó la designación de María Belinda Aguilar Díaz como sucesora de Margarita Gayosso Ponce. Aguilar Díaz, magistrada que pertenece a “La Vieja Guardia del Poder Judicial”, egresada de la Escuela Libre de Derecho, asume un rol central como la nueva magistrada presidenta del Poder Judicial.
En paralelo, Araceli Cabido, quien rindió protesta junto a Carlos Palafox Galeana el 30 de septiembre de 2022, es la nueva titular del Consejo de la Judicatura. Esta serie de cambios en los cargos directivos llega en un contexto marcado por desencuentros y manifestaciones internas en el Poder Judicial.
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La partida de Palafox y Gayosso surge después de una secuencia de tensiones y protestas dentro del Poder Judicial. Margarita Gayosso Ponce fue objeto de acusaciones relacionadas con la organización de manifestaciones en contra del entonces presidente del Consejo de la Judicatura. Por su parte, Carlos Palafox Galeana mantuvo una relación distante con el titular del Poder Ejecutivo, Sergio Salomón Céspedes Peregrina.
Carlos Palafox Galeana hizo pública su renuncia a través de un mensaje en la plataforma X. Explicó que otro perfil sería el encargado de liderar la fase de “implementación” en el Poder Judicial de Puebla.
Por lo que respecta a la renuncia de Margarita Gayosso, se confirmó por medio de sus colegas magistrados tras la votación plenaria que eligió a María Belinda Aguilar como su sucesora.
Simultáneamente, Araceli Cabido asumió el puesto de presidenta del Consejo de la Judicatura, acompañada por los jueces Guadalupe Muñoz Pérez, César Iván Bermúdez y Amadeo Fuentes Añorve, quienes actuarán como consejeros en esta nueva etapa.
Estos cambios marcan un punto de inflexión en la estructura y dinámica del Poder Judicial de Puebla. Representan la incorporación de nuevas figuras en roles de liderazgo y una reconfiguración de responsabilidades. El Poder Judicial afronta así un proceso de transición que podría tener importantes repercusiones en su funcionamiento y toma de decisiones futuras.
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