María de Jesús Mundo, una abuelita de 78 años de edad, lleva cinco años esperando a que su familia regrese por ella en la Central de Autobuses de Puebla.
Su historia se ha vuelto viral en redes sociales, atrayendo la atención de la comunidad.
A pesar de su edad avanzada y de padecer artritis severa que le dificulta moverse, María de Jesús se mantiene consciente de su situación.
Sus hijos, dispersos entre Estados Unidos y algún municipio de Puebla, no han vuelto por ella, dejándola abandonada en la terminal.
Abuelita vive en la CAPU, la abandonaron
Durmiendo cerca de los andenes por las noches y recibiendo caridad de transeúntes y vendedores locales, María de Jesús sobrevive día a día.
Recibe alimentos donados y ocasionalmente se hospeda en un hotel cercano para asearse.
“Eso sí solamente Dios sabe, y sé que mi gente está bien, pero para mí lo más importante es la familia, ya me han hecho muchas, de que me hacen avería y media, pero bueno… eso allá, pero sí sé dónde está mi familia y cómo han tratado de extorsionar a mi hijo, entonces, por eso, mejor… él se me fue muy jovencito para Estados Unidos, en sí para New Jersey y le digo, él es el que ha visto por toda la familia, ahorita, donde esté, que esté bien, que es lo que me importa. Dios dirá lo que sigue.. el hombre propone y Dios dispone”.
Durante el día, se sienta en las bancas de la terminal, donde espera ver a sus hijos que la dejaron ahí hace años.
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A pesar de las ofertas del DIF Estatal para llevarla a un albergue donde podría tener mejores condiciones de vida, María de Jesús se niega a abandonar la terminal, aferrándose a la esperanza de reunirse con su familia algún día.
Las autoridades locales han emitido una ficha de búsqueda para localizar a sus familiares y resolver esta situación que ha conmovido a la sociedad poblana, quienes expresan indignación por la aparente falta de atención y cuidado hacia la anciana por parte de sus hijos.
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