Este 22 de abril celebramos el Día Internacional de la Madre Tierra, y no hace falta plantar un bosque para marcar la diferencia.Te decimos cómo salvarla con pequeñas acciones cotidianas.
Este 22 de abril celebramos el Día Internacional de la Madre Tierra. Científicos y activistas comparten siete acciones tan simples como efectivas que puedes poner en práctica desde hoy, ya sea en casa, en la calle o incluso en lo que comes, para cuidar el único planeta que tenemos.
Spoiler: sí, dejar la carne y usar bicicleta están en la lista, pero hay más (y no todas duelen).
- Ahorra energía sin convertirte en ermitaño
No necesitas vivir a oscuras para reducir tu huella. Apagar luces, cambiar a focos LED, tender la ropa al sol y lavar en frío son gestos que suman.
La energía residencial es uno de los mayores emisores de gases de efecto invernadero, y cada acción cuenta.
- Muévete: tus piernas también salvan al planeta
El transporte individual es un monstruo hambriento de gasolina. ¿La alternativa? Camina, pedalea, súbete al transporte público.
- Planta comida en tu plato: más verde, menos vaca
Reducir el consumo de carne no solo es bueno para el colesterol: es un respiro para el planeta.
La ganadería extensiva arrasa con selvas y vomita metano como si no hubiera un mañana.
Las dietas basadas en vegetales generan menos emisiones y usan menos recursos. Cambia tu menú y salvas árboles, agua y aire.
- Piensa antes de despegar: ¿ese vuelo era necesario?
La aviación representa más del 2% de las emisiones globales. Si puedes reemplazar un viaje por una videollamada o un tren, hazlo.
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Cada kilómetro aéreo que evitas es un favor al futuro. Y si vuelas, hazlo de forma consciente: menos viajes, más razones.
- Tira menos, piensa más: la comida no es basura
Se desperdician más de mil millones de toneladas de comida vegetal al año. Mientras tanto, casi 800 millones de personas pasan hambre.
En el Día de la Tierra cambia tus malos hábitos
Compra solo lo que necesitas, planea tus menús y, si puedes, compostea.
- Reduce, reutiliza, recicla… y repiensa tus compras
Cada cosa que compras, ropa, celular, champú, dejó una huella ambiental antes de llegar a tu mano.
No se trata de dejar de consumir, sino de hacerlo mejor: compra menos, repara, intercambia, dona, recicla. Y sí: ese shampoo sin tapa plástica también cuenta.
- Infórmate, comparte, actúa: ser activista ya no es opcional
No hay cuidado sin conocimiento. La mejor forma de proteger el planeta es entender qué está pasando y cómo puedes involucrarte.
Infórmate, habla del tema, súmate a iniciativas locales y, sobre todo, no te calles.
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