A pocas horas del cierre de registros para el proceso judicial 2025, el panorama revela un marcado desinterés por los cargos superiores, agravado por los estrictos filtros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
Hasta anoche, el Comité de Evaluación del Poder Judicial de la Federación (PJF) reportó 2 mil 948 aspirantes inscritos para competir por alguno de los 881 cargos en disputa, un número insuficiente frente a las necesidades.
Filtros complican el proceso judicial 2025
Particularmente, los puestos superiores enfrentan un déficit alarmante:
apenas unas decenas de abogados se postularon como candidatos a ministros de la Corte, magistrados del nuevo Tribunal de Disciplina Judicial (TDJ) o para la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
El proceso diseñado por la SCJN incluye requisitos más estrictos que los convocados por el Ejecutivo y el Legislativo, que han atraído 9 mil y 10 mil 338 interesados, respectivamente.
La Corte, además, ha añadido un examen escrito obligatorio, algo no contemplado por la ley, y una entrevista personal para las posiciones de mayor rango.
Un déficit preocupante
Para las 386 plazas de juez de Distrito, la SCJN puede proponer hasta 772 candidatos, pero sólo ha registrado 297 aspirantes.
La situación es más crítica para las 464 plazas de magistrado de Circuito, donde hay capacidad para nominar a 928 personas, pero únicamente hay 175 inscritos.
En el caso de la Sala Regional del TEPJF, donde se votarán 15 plazas, apenas 17 personas se inscribieron. Entre los registrados, alrededor de una tercera parte son secretarios de juzgados y tribunales, quienes cuentan con ventaja competitiva por su experiencia.
Las reglas del juego
El 30 de octubre, la SCJN aprobó las reglas que regirán el proceso de selección.
El Comité de Evaluación seleccionará a los 10 mejor calificados para los cargos de ministro, magistrado del TDJ y del TEPJF; y a los seis mejores para juez de Distrito y magistrado de Circuito.
Estas ternas y duplas serán sometidas a la votación del pleno de la Corte en una sesión pública, con fecha límite para enviar las postulaciones al Senado el 7 de febrero de 2025.
Adicionalmente, los aspirantes que no estén de acuerdo con las decisiones del Comité podrán interponer un recurso de inconformidad, el cual será evaluado por los ministros en sesión pública.
El desinterés por las plazas superiores y la exigencia de los filtros propuestos por la SCJN contrastan con el menor rigor de las convocatorias del Legislativo y el Ejecutivo.
Esta disparidad podría afectar la capacidad de la Corte para presentar candidatos suficientes a cada puesto, generando un reto importante para la selección de jueces y magistrados que serán responsables de consolidar el sistema judicial en los próximos años.
El panorama anticipa un complejo proceso de evaluación y selección, con la esperanza de que las estrictas exigencias de la SCJN permitan fortalecer la calidad y legitimidad de las instituciones judiciales en México.