Óscar Obed Parra, un hombre originario de Puebla, vivió una experiencia inesperada mientras realizaba una compra en un OXXO, no imaginaria que la “patrulla espiritual” se lo llevaría.
El incidente, que ha captado la atención en redes sociales, muestra cómo Parra, quien aparentemente tiene problemas de adicción, fue abordado por lo que se conoce como una “patrulla espiritual”, un grupo que lo llevó a un centro de rehabilitación en Tijuana.
La “patrulla espiritual” se lo llevó
El video del suceso muestra a Parra ingresando a la tienda para comprar un refresco. Sin embargo, su visita sorprendió cuando fue rodeado por varios hombres que, con un discurso motivacional, lo persuadieron de acompañarlos a una camioneta.
En el video se puede escuchar a uno de los hombres decir:
“Esa miseria espiritual, carnal. La negación, el primer síntoma de la adicción… Te voy a decir un versículo bien hermoso, sin tanta chimichanga como digo yo, y es el Lucas 14:23 con ese versículo vas a empezar a flotar y vas a empezar a desafiar la gravedad”.
El grupo, que se identificó como parte de la clínica de rehabilitación cristiana JIREH, se especializa en recoger personas en situación de calle con problemas de adicción y llevarlas a sus instalaciones.
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La intervención, aunque motivada por la intención de ayudar, ha generado una ola de reacciones diversas en redes sociales.
Donde se cuestiona la forma en que se llevó a cabo el procedimiento y el papel de estas patrullas espirituales.
La “patrulla espiritual” opera en una camioneta rotulada con un pasaje bíblico y el nombre de la clínica.
Su objetivo es brindar apoyo a personas con adicciones mediante métodos no convencionales.
El incidente ha suscitado un debate sobre la ética y legalidad de su enfoque, así como sobre la necesidad de regulaciones para este tipo de intervenciones.
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