Pemex ha dado a conocer un alarmante aumento en el robo de gasolina, revelando que el delito ha alcanzado niveles críticos.

El robo diario de gasolina a PEMEX ha alcanzado niveles alarmantes, con pérdidas equivalentes a llenar el tanque de más de 100 mil automóviles cada día.

A pesar de los esfuerzos iniciales de la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador para erradicar este delito, las cifras recientes muestran un incremento preocupante.

El 10 de abril de 2019, en su conferencia mañanera, AMLO declaró:

“Es muy bueno el avance, hemos logrado prácticamente desaparecer el robo de combustible. En las comunidades donde pasa la gente nos ha apoyado mucho de dos maneras, primero, no apoyando a las bandas de robo de combustible.Segundo, incorporándose a los Programas para el Bienestar”.

No obstante, al cierre de su sexenio, los datos reflejan una realidad distinta.

En 2023, Pemex reportó un robo de 1,708 millones de litros anuales, equivalentes a 28,467 pipas o 78 pipas diarias.

ÚNETE A NUESTRO CANAL DE WHATSAPP

Esta pérdida de hidrocarburos se tradujo en una pérdida económica de 761.4 millones de dólares.

Aunque al inicio del actual gobierno, las acciones contra el robo de combustible lograron reducir las pérdidas de 3,396.1 millones de litros al cierre de 2018 a solo 378.1 millones de litros en 2019, el problema ha resurgido.

Según datos de la petrolera mexicana, las desviaciones de hidrocarburos se concentran en ductos ubicados en:

  • Hidalgo
  • Jalisco
  • Tamaulipas
  • Puebla
  • Estado de México
  • Nuevo León
  • Veracruz

En 2023, Pemex registró 14,890 piquetes a ductos, un aumento del 6.7% en comparación con 2022.

Aumento en el robo de gasolina

Los municipios más afectados fueron Cuautepec de Hinojosa en Hidalgo, con 481 tomas clandestinas, y Tototlán en Jalisco, con 430 piquetes.

Un superintendente de la Subdirección de Transporte de Pemex Logística comentó a REFORMA que:

“la alza coincide con el aumento de piquetes a ductos, el movimiento de los huachicoleros de un estado a otro, el contubernio de autoridades y el uso de túneles para ocultar las tomas clandestinas”.

Durante el sexenio pasado, el robo de combustible creció significativamente, pasando de 1,498 millones de litros en 2014 a 3,396.1 millones de litros en 2018.

En comparación, el año 2023 cerró con 1,708.2 millones de litros robados, mostrando una tendencia preocupante similar a los niveles de 2016, cuando se registraron 1,626.5 millones de litros.

TE PUEDE INTERESAR:

Viaja a Puebla