En la conferencia matutina de este 10 de julio, el presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) fue un “tropiezo administrativo” desde su creación.
El mandatario admitió que su administración no logró establecer un diálogo suficiente para resolver los conflictos en organismos como la agencia de noticias Notimex.
López Obrador destacó que su política “Para el Bienestar” tuvo importantes aciertos, como la dispersión de recursos y programas sociales sin intermediarios, además de la reestructuración administrativa de diversas instituciones.
Sin embargo, en materia de salud, el Insabi no cumplió con las expectativas desde su lanzamiento en 2019.
El presidente recordó que el Insabi buscaba replicar un modelo que él implementó cuando fue funcionario federal en Tabasco durante el sexenio de José López Portillo, con la creación de unidades médicas rurales y hospitales para atención de segundo nivel.
“En el caso de la salud, ahí no funcionó lo que teníamos pensado, desde el principio teníamos pensado el IMSS-Bienestar”, comentó.
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López Obrador atribuyó el fracaso del Insabi a varios factores, como la falta de legislación para la compra de medicamentos en el extranjero, problemas en la distribución de insumos a clínicas y hospitales, y la pandemia de covid-19.
A pesar de ello, consideró que el Insabi sentó las bases para la federalización del sistema de salud, que ahora se implementa a través del IMSS-Bienestar.
“Sirvió para eso y otras cosas, pero no era lo que originalmente estábamos pensando. Ahí tuvimos un tropiezo administrativo, se corrigió y ahí vamos”, apuntó.
En cuanto al conflicto en la extinta agencia de noticias Notimex, López Obrador admitió que faltó diálogo con la base trabajadora, afectada por un desencuentro con la extitular del organismo, San Juana Martínez, que derivó en más de 1,000 días de huelga. “Ahí sí, faltó diálogo,” reconoció el presidente.
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