Hoy se cumplen diez años desde aquel fatídico 29 de junio de 2014, cuando la Selección Mexicana enfrentaba a los Países Bajos en los Octavos de Final del Mundial de Brasil, hasta la fecha ¡No era penal!
La escena que aún resuena en la memoria de los aficionados mexicanos es la controversial frase ‘No era penal’, que marcó un antes y un después en la historia del fútbol nacional.
En el Estadio Castelao, con el marcador empatado y el tiempo añadido agonizando, Arjen Robben se internó en el área mexicana y cayó tras un contacto con Rafael Márquez.
La decisión del árbitro Pedro Proença de señalar penal desató la indignación y las lágrimas en Brasil y en México por igual. Klaas-Jan Huntelaar convirtió el penal y sentenció el destino de México en ese mundial.
Dirigida por Miguel Herrera, la selección mexicana había mostrado un desempeño destacado, con Giovani dos Santos como figura, hasta que la controversial decisión arbitral cambió el rumbo del partido y dejó a millones de aficionados con el corazón roto.
Una década después, la figura de Arjen Robben, quien protagonizó aquella jugada decisiva, sigue siendo recordada en México, aunque el jugador ya se ha retirado del fútbol de élite.
El debate sobre si fue o no penal sigue vigente entre los aficionados, quienes aún lamentan aquella eliminación que quedó marcada en la historia del fútbol mexicano.