En un alarmante caso de abuso policial, se ha denunciado que en San Baltazar Atlimeyaya, policías municipales están violentando a los detenidos al encerrarlos en una especie de calabozo dentro de la iglesia del lugar.
El párroco aparentemente ha permitido que este espacio se convierta en un sitio de brutalidad, donde los detenidos son golpeados severamente.
A través de varios videos que circulan en redes sociales, se puede observar a una persona explicando la situación.
Según su relato, en lugar de llevar a los detenidos a la comandancia, los policías los encierran en el calabozo de la iglesia.
Donde son golpeados y dejados encerrados de manera indefinida, sin acceso a necesidades básicas.
Raymundo N, quien fue detenido este fin de semana por presuntos delitos, es además uno de los casos más recientes y preocupantes.
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En un video que ha circulado ampliamente, Raymundo N aparece pidiendo auxilio.
Sin embargo, hasta este martes, se reporta que sigue sin recibir agua ni comida.
Ante esta situación, el hijo del detenido ha solicitado la intervención del Obispo, pidiendo una revisión urgente del caso.
Expresó su temor de que su padre pueda morir debido a las condiciones en las que se encuentra. Además, destacó que no se le han comprobado los delitos que le imputan.
El hijo explicó que el 2 de junio, varios policías municipales llegaron a su domicilio, sacaron a su padre a la fuerza entre jalones y golpes.
Además, denunció que una turba intentó linchar a su padre, responsabilizando de estos hechos al edil auxiliar Lorenzo Flores y al párroco de la iglesia.
Según su declaración, ambos están al tanto de estas acciones y no han hecho nada para evitarlo.
Este caso pone en evidencia una grave violación de los derechos humanos y ha generado una fuerte indignación en la comunidad y en redes sociales.
Las autoridades competentes deberán investigar estos hechos con celeridad y transparencia para garantizar la justicia y el respeto a los derechos de los detenidos.
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