La noche del viernes, un sismo de magnitud 6.1 sacudió Guatemala, alcanzando a sentirse en algunas regiones de El Salvador.
Afortunadamente, no se reportaron daños materiales ni personas lesionadas como resultado de este evento sísmico.
De acuerdo con el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), el epicentro se localizó en el departamento de Escuintla, aproximadamente a 80 kilómetros de la capital guatemalteca, con una profundidad de 35.5 kilómetros.
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El alcalde de la Ciudad de Guatemala, a través de su cuenta de X, aseguró que no se registraron daños en la capital. Los equipos de emergencia llevaron a cabo monitoreos para evaluar la situación.
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“Espero que todas las familias en la ciudad se encuentren bien luego de este temblor. No tenemos reporte de daños hasta ahora en zonas de la capital”, declaró el alcalde.
El Presidente de El Salvador, Nayib Bukele, confirmó que se realizaron monitoreos en las zonas del país donde se sintió el sismo originado en Guatemala.
Instó a los ciudadanos a mantenerse informados a través de los canales oficiales.
Guatemala, dada su ubicación geográfica y la convergencia de las placas tectónicas Caribe y Cocos, así como fallas geológicas locales, es propensa a experimentar movimientos telúricos.
Según las autoridades, el 90% del territorio guatemalteco es considerado como área propensa a los temblores.
A pesar de la frecuencia de estos eventos, la rápida respuesta de los equipos de emergencia y la conciencia pública han contribuido a mitigar posibles consecuencias adversas.
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