Sí, sí, no fue Nacho. Sí, sí, ya se arreglaron, pactaron y resolvieron todo entre viernes y domingo. Y sí, definitivamente las plumas que siguen atacando a Nacho Mier corren el riesgo de no ser invitados a la mesa de ninguno de los señores, porque ellos ya pactaron.
Vamos por partes.
Pese a que ciertos grupos de Morena intentaron reventar la negociación entre los primos Alejandro y Nacho con llamadas falsas, lo cierto es que los puentes estaban tendidos desde el viernes y no por ellos mismos, sino por personajes del más alto nivel. Estos le hicieron, a Nacho Mier, una propuesta que no pudo rechazar. Si quieren entender por dónde va todo, les dejo un fragmento de mi columna del viernes:
¿Qué pasa si no es Nacho Mier?
Se confirmaría lo que comenzó a palparse esta semana. Lópezcraist, nuestro señor… presidente, se está preparando para defenderse de Claudia Sheinbaum.
La renuncia de Arturo Zaldivar no es casualidad, está cediendo un espacio para una ministra afín al presidente.
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Si el macuspano decide que Nacho Mier no será candidato a gobernador, es porque lo va a convertir en contrapeso en el Olimpo y se confirmará lo que ya era evidente, que el de Tecamachalco ya no es parte de la política aldeana, sino de la nacional.
¿Le esperarían no solo la presidencia del Senado y la Coordinación de la bancada de Morena? Por supuesto.
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El día de ayer se formalizó ya esa alianza, en la que sumó a la estructura de los morenachos, compuesta por 7 mil 498 comités y 15 mil promotores con la de Morena en Puebla.
Alejandro Armenta nunca ha perdido afinidad con las estructuras priistas, quiénes hoy, eufóricas, ven en su expresidente y excoordinador de campaña de 2012 a un aliado que les puede permitir volver al presupuesto. Y recordemos que vivir fuera de él, es vivir en el error. Sumemos a ese “ejército” a la estructura que de por sí opera con él.
Por otro lado, Nacho Mier suma a la estructura externa operativa más grande jamás conformada, la adhesión de esta es fundamental para que la victoria de Morena sea contundente y esta, ya se dio ayer en la sesión del IMT.
Además hay algo extra, viene la estructura gubernamental “que nunca opera”.
Habría que sumar a todo esto, los bonos del buen desempeño de Sergio Salomón al frente del Gobierno estatal.
¿Estamos en la antesala de los carros completos, como los del priismo en 2007 y 2009? Todo parece indicar que sí. Y quién se equivoque corre el riesgo de no ser invitado a la mesa.
Lo que los primos de “unos amigos” que ya no juegan en este plano querían evitar, ya pasó. Nacho Mier se suma y a la hora del reparto del pastel, le tocará una rebanada bastante más grande que a los demás. Así es esto.
Lo que las plumas afines a esos personajes intentaron reventar al comparar a Nacho con Marcelo Ebrard, quedó superado. Esa narrativa solo les duró un día. Su perverso objetivo no se logró y deberían entender tres cosas:
La primera, no somos Nuevo León y ninguno es el Norte, así que no, no definen elecciones.
Segunda, que la gente ya no lee tanto y dedica más tiempo a ver video cortos. Además que una pluma le escribe al círculo rojo y ese no representa a más del 2% de la población.
Y tercero, que, si siguen excediéndose, corren el riesgo de no ser invitados a la mesa.
La misma tontería de siempre, “los pies” se siguen peleando, mientras “las cabezas” ya acordaron.
¡Mesura, compañeros, mesura!