El equipo de futbol americano de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) ha levantado su voz en un acto de denuncia, alegando haber experimentado una serie de malos tratos antes, durante y después de su reciente partido contra la Universidad Anáhuac Cancún.
Los jugadores del equipo universitario han expresado su descontento, afirmando que la BUAP ha condicionado el apoyo y respaldo necesario para su desempeño durante esta temporada.
A pesar de haber sido designados como representantes de la institución, alegan que no se les proporcionó ningún distintivo oficial de la universidad.
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Además, se quejaron de una falta de atención médica adecuada y de suministros esenciales, como hidratación durante los partidos.
Uno de los jugadores del equipo declaró:
“Nos dieron esta temporada de prueba, pero sin apoyo. La BUAP no nos dio ningún distintivo de representación, nos ignoraron, no nos dan la atención médica necesaria, no nos dan hidratación en el campo. Ayer jugamos contra la Anáhuac dando el máximo, pero el cansancio de un viaje de más de 30 horas salió a relucir”.
La indignación de los jugadores alcanzó su punto máximo cuando el vehículo que debía llevarlos de regreso tras el partido quedó varado en una carretera entre Tabasco y Campeche.
Los integrantes del equipo alegan que, a pesar de la difícil situación, la BUAP no ha proporcionado ninguna solución para resolver los problemas mecánicos del vehículo.
Esta denuncia por parte del equipo de futbol americano de la BUAP ha generado una oleada de apoyo por parte de la comunidad estudiantil y deportiva.
Se espera que esta controversia genere un debate más amplio sobre el trato y el respaldo que las instituciones educativas brindan a sus equipos deportivos, así como un mayor escrutinio de las políticas y prácticas de la universidad en relación con el deporte.
