Fue el 19 de marzo de 2010, cuando los elementos del Ejército ingresaron sin motivo a las instalaciones del Tec en la ciudad de Monterrey y dispararon contra los dos estudiantes, además de golpearlos y sembrarles armas. 13 años después se condenan a militares por asesinato.
En ese momento, el ejército mexicano buscó justificar los actos al señalar a los alumnos como presuntos sicarios.
Y fue hasta marzo del 2019 cuando la entonces secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, reconoció que los jóvenes eran inocentes y que habían sido asesinados en manos de los soldados.
¿Cómo fue la tragedia?
Los estudiantes originarios de Saltillo, Coahuila, Jorge Antonio Mercado Alonso y Javier Francisco Arredondo Verdugo, eran ingenieros en macarrónica.
Por su parte, Jorge, se encontraba cursando la maestría en Ciencias y Javier cursaba el doctorado en Ciencias de la Ingeniería.
Ambos, eran estudiantes destacados.
La noche del triste suceso, se habían quedado hasta tarde a estudiar en la biblioteca de la institución.
En esa época, México se encontraba en guerra declarada con el narcotráfico, por lo que eran frecuentes enfrentamientos entre militares e integrantes de grupos delictivos.
Ese 18 de marzo de 2010, se registraba un enfrentamiento armado entre tres camionetas de miembros del crimen organizado y soldados de la Séptima Zona Militar en Nuevo León del Ejército Mexicano, luego de que una llamada anónima alertó de dos mujeres secuestradas en un predio.
En tanto Jorge Mercado y Javier Arredondo salieron del campus para cenar y abandonaron las instalaciones a las 0:38 horas del 19 de marzo, y volvieron a entrar y salir por el mismo acceso entre esa hora y las 00:59 mientras ocurría el segundo enfrentamiento.
Según los peritajes, Jorge recibió seis disparos, dos de los cuales fueron realizados a una distancia corta.
Por su parte, Javier presentó siete heridas de bala.
Además, ambos cuerpos presentaban golpes graves propinados cuando aún estaban vivos.
Además de los estudiantes, dos ciudadanos que iban a bordo de una camioneta también fallecieron en el fuego cruzado.
Tiempo después se comprobaría que los militares los mataron cerca del campus, manipularon la escena del crimen para colocarles armas e impidieron que las autoridades acudieran al sitio.
Esta es la primera vez que condenan a militares en México
José Reynoso Castillo, titular del Juzgado Cuarto de Distrito en Materia Penal en el Estado de Nuevo León, dictó la sentencia en contra de cinco de los seis militares ligados a este caso, quienes se les señala como los autores materiales del delito de homicidio calificado.
En 2019, nueve años después del crimen, el gobierno Mexicano ofreció disculpas públicas.
”Ofrezco una disculpa pública por la violación a sus derechos en el marco del uso excesivo de la fuerza por el que fueron privados de la vida sus hijos”, señaló Olga Sánchez Cordero, entonces secretaria de Gobernación.
A la fecha se sabe que hay cinco elementos del Ejército detenidos por esos hechos, tres permanecen en una cárcel militar y dos en un penal ubicado en Nuevo León.
Y aunque fueron seis los que supuestamente participaron en los hechos, uno se encuentra en calidad de desaparecido.
Condenan a militares por asesinato
El juez José Reynoso Castillo, del juzgado cuarto de distrito de Nuevo León, dictó lo que es la primera sentencia en el caso, en donde los militares fueron encontrados culpables del delito de homicidio calificado con la agravante de ventaja.
Pese a que el juez dio una condena de 90 años a los involucrados, el sistema sólo permite el cumplimiento de 60 años.
Esta situación se suma a que aún están pendientes condenas por otros delitos como robo de identidad, abuso de autoridad y exceso de la fuerza.
