Llegan a Puebla empresarios sinaloenses, pero los habitantes del municipio de Coatzingo, Puebla, expulsaron de sus tierras al grupo de “empresarios” que en días previos el alcalde había presentado a los habitantes como supuestos empresarios provenientes de Sinaloa.
Dichos “empresarios” anunciaron una supuesta granja de cerdos, que resulto ser nada más y nada menos que un narcolaboratorio.
Cosa que a los habitantes de la comunidad mixteca poblana, no les pareció, por lo que se unieron y organizaron para sacar de su territorio.
En el lugar en donde existiría la supuesta granja de cerdos, en realidad operaban un laboratorio para la elaboración de drogas sintéticas.
En el inmueble dejaron 51 tambos de 50 litros y 28 toneles de 200 litros con químicos, dos básculas y 12 quemadores.
Todo esto ya se encuentra asegurado y vigilado por elementos del Ejército y de la Guardia Nacional.
Para sorpresa de los habitantes locales, a pesar de la presencia de las autoridades federales, nunca se emitió ningún reporte
Por las carreteras y al rededores solo transitan patrullas municipales y estatales, pero los habitantes desconfían de las corporaciones, ya que fue el mismo presidente municipal, Abel Chávez quien se mostró cercano a los empresarios y presumía de contar con influencias en el gobierno del estado.
“Nosotros en Puebla tenemos buena influencia con el gobierno, estamos bien (con ellos), gracias a Dios”, se escucha decir a uno de los sinaloenses en un audio proporcionado a Proceso.
Por lo que la desconfianza hacia las autoridades está presente en la gente local, también por que fue por ellos mismos que se descubrió todo esto.
Y quienes, por su cuenta pidieron a los sinaloenses que dejaran las tierras, esto sucedido un 17 de junio, dándoles como plazo el 21 de ese mismo mes.
Llegan a Puebla empresarios sinaloenses, pero resultan ser narcos.
Los “narcos” se retiraron el 20 de junio, y fue entonces que descubrieron los tambos con químicos e instrumentos que utilizaban para la fabricación de la droga, aunque aún no saben de cuál se trataba en específico.
Los patrullajes comunitarios, llamados Fuerza Territorial Poblana, permitieron detectar los vehículos de los supuestos empresarios sinaloenses, dicen los entrevistados; de otra forma podrían ser que aún estuvieran operando en “La Cástula”.
Los pobladores tampoco tienen certeza si los sujetos a los que expulsaron de esa localidad pertenecían a un grupo delincuencial. Por inferencia, después que dos se identificaron como originarios de Culiacán, presumen que pueden ser parte del Cártel de Sinaloa.
Pero, aunque han preguntado a las autoridades, perciben un silencio oficial sobre esos hechos.
Los habitantes se han percatado que todos los días, alrededor de las diez de la mañana, una avioneta sobrevuela la zona y vehículos y motocicletas todoterreno circulan por las cercanías.
El presidente municipal, incluso, ha tachado de “chismosos” a los denunciantes y ha divulgado que los toneles –que custodia el Ejército y la Guardia Nacional– realmente contienen diésel y agua.
Chávez llegó a la presidencia municipal por el partido Redes Sociales Progresistas, pero ahora busca reelegirse por Morena, con el apoyo de Julio Huerta Gómez, exsecretario de Gobernación de Puebla, aspirante a la gubernatura por ese partido y primo del fallecido gobernador Miguel Barbosa Huerta.
Con información de Proceso.
