En un video compartido en sus redes sociales, Gálvez desafió a sus contrincantes y reiteró su confianza en que millones de mexicanos la recibirán con las puertas abiertas.

ÚNETE A NUESTRO CANAL DE TELEGRAM

La senadora, conocida por su activismo y aspiraciones presidenciales de oposición, declaró:

“Que no soy indígena, que no soy ingeniera, que no vendí gelatinas ni tamales, que no tengo pueblo, que me controla un grupo de hombres, que no represento a las mujeres y ahora hasta quieren demoler mi casa… Todo está en orden y es legal. Los reto, demuélanla, no me preocupa. Así como la gente me abrió su corazón cuando me cerraron Palacio Nacional, ahora la gente me recibirá en sus casas con las puertas abiertas. Si me quitan mi cocina, no me faltará quien me dé un taco en cada esquina.”

Vivirá en casa de millones de mexicanos

La polémica surgió cuando Morena exigió al alcalde de Miguel Hidalgo, Mauricio Tabe, que verificara y clausurara el conjunto habitacional donde reside Xóchitl Gálvez, alegando que se trata de una “construcción ilegal”.

Según un comunicado emitido por Morena, el lugar ubicado en la colonia Reforma Social cuenta con un Aviso de Terminación de Obra pero carece del permiso de Uso y Ocupación, lo que lo hace inhabitable según la ley.

Morena también instó a investigar posibles conflictos de interés en la construcción del complejo y solicitó a las autoridades de Miguel Hidalgo que ejecuten la demolición en caso de irregularidades en la edificación.

La respuesta audaz de Xóchitl Gálvez a este desafío muestra su determinación en medio de una creciente controversia, mientras continúa su lucha política en busca de la presidencia de México.

La situación actual plantea interrogantes sobre el futuro de su residencia y el respaldo que pueda recibir de la ciudadanía en este nuevo capítulo de la política mexicana.

Te puede interesar:

maleta estrella roja