En un reportaje explosivo titulado “Absuelta por Sheinbaum: Gobierno de la CDMX quitó castigo a empresa ligada a políticos de Morena,” el periodista Mario Gutiérrez Vega de Latinus revela una controvertida historia sobre la adquisición de fentanilo y otros medicamentos por parte del Gobierno de la Ciudad de México, mientras Claudia Sheinbaum encabezaba la administración.

La compra se realizó a través de la empresa Abastecedora de Insumos para la Salud (Abisalud), la cual estaba vinculada a Carlos Lomelí, un político morenista y exsuperdelegado federal en Jalisco.

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A pesar de que Abisalud había sido previamente inhabilitada por la Secretaría de la Función Pública (SFP) y estaba bajo escrutinio de la DEA de Estados Unidos, el Gobierno de la Ciudad de México firmó 16 contratos con esta empresa por un valor de aproximadamente 165 millones de pesos.

Contratos con compra de Fentanilo

Estos contratos incluían la compra de fentanilo, una sustancia que ha sido motivo de fuertes tensiones diplomáticas con Estados Unidos, así como ivermectina y materiales médicos.

Carlos Lomelí, quien había sido superdelegado del gobierno federal en Jalisco al inicio del sexenio, tuvo que renunciar a su cargo debido a investigaciones periodísticas.

Ya que demostraban su participación en empresas farmacéuticas con vínculos con el Gobierno de México.

Además de Abisalud, otras empresas vinculadas a Lomelí enfrentaron sanciones e inhabilitaciones por parte de la Secretaría de la Función Pública debido a la falsificación de información en procesos de licitación.

Aunque Abisalud había sido suspendida por dos años y medio por la SFP en julio de 2020, la empresa logró eludir esta sanción mediante amparos que fueron aceptados y respaldados por el gobierno capitalino.

Esto permitió que la empresa continuara haciendo negocios con el Gobierno de la Ciudad de México, a pesar de la inhabilitación.

Información falsa en los contratos firmados del fentanilo

El reportaje revela que, en los contratos firmados con la Secretaría de Salud de la Ciudad de México, los representantes de Abisalud proporcionaron información falsa al afirmar que la empresa no tenía sanciones ni impedimentos administrativos para vender sus productos al gobierno.

Esto a pesar de que la inhabilitación impuesta por la SFP prohibía cualquier compra gubernamental a Abisalud hasta 2023.

Entre enero de 2021 y diciembre de 2022, la Secretaría de Salud de la Ciudad de México firmó 16 contratos con Abisalud, 12 de los cuales fueron por adjudicación directa.

Estos contratos incluyeron la adquisición de:

  • material de curación
  • tubos hospitalarios
  • cánulas
  • bisturís
  • antisépticos
  • miles de dosis de medicamentos
  • incluyendo 60 mil ampolletas de fentanilo inyectable por más de un millón 200 mil pesos.

Ciudadanos participaron sin su conocimiento

También se utilizaron 13 mil 255 envases de ivermectina en el marco de la lucha contra la Covid-19

En un estudio del que no se informó a los ciudadanos que participaron sin su conocimiento.

Este escandaloso caso pone de manifiesto las conexiones controvertidas entre la política y el negocio farmacéutico en México.

Así como las implicaciones de seguridad relacionadas con la compra de sustancias sensibles como el fentanilo por parte del gobierno.

Además, arroja luz sobre la presión ejercida por la DEA y el Departamento del Tesoro de Estados Unidos sobre las empresas farmacéuticas vinculadas a Lomelí.

Incluida la confesión de la venta de precursores químicos al Cártel de Sinaloa y el pago de 2.7 millones de dólares al Gobierno de Estados Unidos para eliminar registros relacionados con el narcotráfico.

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