Un sismo de magnitud 6.2 sacudió la isla japonesa de Hokkaido el domingo, sin causar daños ni heridos, según informó la Agencia Meteorológica de Japón.
El epicentro del sismo se ubicó en la parte sudoccidental de la isla, a 136 kilómetros (85 millas) de profundidad.
Aunque el temblor estremeció a gran parte de la isla, incluyendo las ciudades de Chitose y Atsumacho, no se emitió ninguna advertencia de tsunami.
Además, no se reportaron daños en las plantas nucleares de la región ni interrupciones en el suministro de energía o en las rutas de los trenes bala.
A pesar de la falta de daños significativos, las autoridades pidieron a la ciudadanía estar alerta ante posibles réplicas en los próximos días, así como la posibilidad de deslizamientos de tierra.
Se registraron demoras en los trenes locales y se cerró temporalmente un tramo de una carretera, según reportes de la emisora Hokkaido HTB News.
El aeropuerto de Hokkaido también se vio afectado por el sismo, como lo mostraron imágenes en los canales de televisión locales, donde se observaba un cartel meciéndose debido al movimiento telúrico.
Residentes locales informaron que el temblor tuvo una duración de aproximadamente 20 a 30 segundos.
Aunque el sismo se sintió en partes del norte de Honshu, la isla más grande de Japón donde se encuentra la capital, Tokio, la ciudad no sufrió ningún impacto significativo debido al evento.
Japón, conocido por ser uno de los países más vulnerables a los terremotos en el mundo, cuenta con una infraestructura y protocolos de respuesta bien establecidos para hacer frente a estos eventos naturales.
Aunque en esta ocasión no se registraron daños ni heridos, la población se mantiene alerta y preparada para futuros movimientos telúricos.
